Cuando el amor se presenta de imprevisto es mejor abrirle la puerta… te presentamos un poema de Claudia G. Roldán:
Entonces te vi, frente a mí, más real que nunca,
murmurando te amos al infinito,
tarareando canciones de amor
mientras mirabas las estrellas tomaste una decisión,
decidiste subir a cortarme una docena de ellas,
quise darte un pedazo de luna
pero mis brazos eran muy débiles para arrancarlo,
intenté tomar un pedacito de cielo
pero no cabía en mis manos,
quise robar un canal de Venecia para adornar tu jardín
y colocar el mar en una botella,
pero siempre he sido tan pequeña
que nunca pude mostrarte la inmensidad de mi amor,
entonces te fuiste y tarde me di cuenta que no querías mares,
ni cielos, ni canales,
mientras yo te buscaba lunas, tú me buscabas a mí.
**
Lo mejor para que nuestro pecho sane poco a poco es la lectura, por eso es que estos 3 poemas los debes leer cuando tienes el corazón abierto.