Declaro que las tristezas
no son para siempre,
que los cometas son aviones
y que es saludable
experimentar la caída libre.
Declaro que la música nos eleva,
que el sol es para todos,
que la riqueza no está en el banco
sino en lo que no se puede contar.
Declaro que el cielo no es azul,
que la imaginación viaja más rápido
que cualquier nave espacial,
que los lugares más hermosos que he visto
son los que he leído
y las cosas más hermosas que he leído
son las que he visto.
Declaro que una sonrisa cambia más al mundo
que un comercial de televisión,
que es legal robar besos
e intrascendente sufrir sin razón.
Declaro que si uno comparte lo que sabe
y escucha lo que ignora
sin tratar de inmutar nada por vano egoísmo,
el amor tarde o temprano va a triunfar.
