Una vida llena de controversias es el reflejo de sus obras; fue en ésta donde plasmó la verdadera esencia de todo aquello que alguna vez fue. Se despide con una carta y llena su ropa con rocas para así hundirse en las profundidades del río Ouse. Virgina Woolf, una autodidacta y apasionada por la literatura inglesa en todas sus facetas, escribía desde ensayos y relatos, dejando en tinta sus recuerdos y memorias más importantes, hasta novelas, convertidas en espejismos de su vida cotidiana.
En su literatura aparece el desahogo como medio catártico y de esta forma Woolf buscó plasmar sus ideas mediante historias. Historias fantásticas en mundo reales. Aparecen sus puntos de vistas y firmes posiciones ante las adversidades de la vida. Hay quienes la llamaban la gran diosa flamígera del feminismo socialista. Desde su infancia se guiaba por su carácter dominante y rebelde, le costó mucho trabajo comprender porqué, mientras sus hermanos estudiaban en Cambridge, ella tenía que quedarse en casa atendiendo las necesidades de su padre. Esta situación cambió con su muerte, la de su padre, pues a partir de este momento logró sumergirse en el mundo autodidacta y así comenzó a potencializar sus habilidades literarias que cuentan la historia de su vida.
Una mujer de contradicciones que marcó territorios marginales como también se dirige a aquellos que son y fueron intelectuales. Hay quienes la consideraban loca por sus enfermedades de anorexia y bipolaridad. Sin embargo, no se puede dejar de mencionar su extraordinario trabajo a la hora de reflexionar y expresarse mediante las letras. Sus obras son el puro reflejo de su capacidad de reflexión en una gran diversidad de temas y situaciones que hasta hoy podrían generar gran controversia.
Un personaje autentico y creativo, capaz de conquistar a la literatura y darle un giro en todas sus posibles direcciones. Debido a estas cualidades, hoy es una mujer que se encuentra en todas partes. Su extraordinaria riqueza de textos, imágenes reveladoras se aparecen en todo el mundo y hacen alusión a la mujer determinante y firme en sus decisiones. Fue así como logró convertirse para muchos escritores en una figura referente y en una fuente de inspiración. En muchos casos su figura femenina y poderosa intelectualmente, era consideraba una amenaza, ya que era el puro reflejo de la controversia. Aún así, mediante sus novelas vanguardistas, unas muy diferentes a las otras, logró el acceso al canon universal.
Su gran abanico de técnicas y puntos de vista nos llevan a sumergimos en su mundo de la literatura. A continuación les presentamos algunas de sus obras más reconocidas que podrán descargarlas gratis en este sitio.
Orlando
Para aquel que nunca ha leído a Virgina Woolf, recomendamos comenzar con la obra Orlando. Una novela risueña y llena de humor, que mediante su poesía e inspiración te lleva a más allá de la realidad. Es así como te envuelve en la biografía de un poeta imaginario nacido en el siglo XVII y que un siglo después sigue vivo y cambia de sexo.
Fin de viaje
Fin de viaje es su primera novela, escrita 26 años antes de que Virginia se hundiera en las frías aguas del río Ouse. En esta historia se adelanta a sus últimos días de vida. Narra cómo comienza su cuenta regresiva al contar la historia de la joven Rachel Vinrace. En este texto critica al mundo de aquella época y rompe los esquemas de la narración. Se plasma su concepción de si misma y las últimas horas de su vida.
El cuarto de Jacobo
No son las catástrofes, los asesinatos, las muertes, las enfermedades las que nos envejecen y nos matan; es la manera como los demás miran y ríen y suben las escalinatas del bus”. (El cuarto de Jacobo).
El cuarto de Jacob, escrita en 1922, es la primera gran novela publicada por Hogarth Press. En esta historia comienza a introducir el estilo propio, que la caracteriza años después. En la novela no se identifica un argumento con sentido y los personajes se revelan a través de un monólogo interior. Se relata la vida de Jacob Flanders desde su niñez hasta su muerte en la guerra. Te invita a hacer reflexiones aleatorias al envolverte en la vida cotidiana del personaje.
Una casa encantada y otros cuentos
A cualquier hora que una se despertara, una puerta se estaba cerrando. De cuarto en cuarto iba, tomada de la mano, levantando aquí, abriendo allá, cerciorándose, una pareja de duendes. «Lo dejamos aquí», decía ella. Y él añadía: «¡Sí, pero también aquí!» «Está arriba», murmuraba ella. «Y también en el jardín», musitaba él. «No hagamos ruido», decían, «o les despertaremos.» Pero no era esto lo que nos despertaba.
En una casa encantada y otros cuentos, Virginia Woolf reescribe de algún modo los parámetros del cuento de fantasma. Para aquel que únicamente conoce sus novelas, se sorprenderá al conocer su técnicas que utiliza para el cuento.
La señora Dalloway
“La vida misma, cada momento de ella, cada gota de ella, aquí en este instante, ahora, en el Sol, en Regent’s Park, fue suficiente, de hecho, demasiado”. (La señora Dalloway).
La señora Dalloway es aquella en la que años después Michael Cunningham se inspira para escribir su novela: Las horas. En ella aparece el tema principal de la escritora, la escisión entre el deber ser y el querer ser de la mujer de su época; así como otros temas que giran alrededor de la vejez y la sexualidad.
Las olas
“¿Es éste el final de la historia?. ¿Una especie de suspiro?. ¿El último temblor de una ola?… Pero, si no hay historias, ¿qué final puede haber, qué principio? Quizá la vida no sea apta para el tratamiento que le damos, cuando intentamos contarla”.
Según Virginia “escribe Las olas en un estado de visión semimística de la frágil existencia”. La metáfora de las olas representa el tiempo; así mismo, el recurso literario de la “técnica el fluir de la conciencia”.
Al faro
En una de las cimas más creativas de su carrera, Virginia escribe “Al faro”. Una narración envolvente e hipnótica. Es la historia que se basa en la infancia de la autora. Lo importante es que veamos a través de sus letras la escarpada costa escocesa, la familia, su círculo de amigos que se amplían en exiguos veranos.
Noche y día
“La joven generación está llamando a la puerta”; yo le respondí: “¡Oh, la generación joven suele entrar sin llamar, mister Pelham!” (Noche y día)
Noche y día narra al Londres de principios del siglo XX. Woolf se rebela ante las típicas señoras amas de casa de aquel entonces. Aquellas mujeres que obedecen los parámetros marcados por el hombre. Son ellas las que se retiran cuando los hombres, como en cumplimiento de un rito religioso comienzan a beber y a fumar.
Una habitación propia
“Las mujeres han vivido todos estos siglos como esposas, con el poder mágico y delicioso de reflejar la figura del hombre, el doble de su tamaño natural”.
Al igual que novelas, también escribió ensayos. En el caso de una habitación propia narra historias de paseos en Londres, con un gran contenido de reflexión acerca de la vida cotidiana. Este ensayo es un reflejo de la vida de las mujeres y la literatura.
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