En esta oportunidad el novel escritor Orlando Leoni nos regala otro de sus poemas, un breve pero incisivo texto que se adentra en lo que parece ser una intimidad literaria —y personal— construida mediante su afán por indaga el deseo como forma sutil del amor, concediendo al detalle una importancia estética y simbólica que encierra las claves de su estilo directo y subversivo.
El llamado de la naturaleza
Te encuentro en mi vida como un respiro
inflando paso a paso mi día
tejiendo al recuerdo un hilo del presente
como dos estrellas en el firmamento de tu boca
juntos, esa configuración estelar del cuerpo
somos el caos más hermoso
tal para cual, un par de sedientos por el amor y el peligro.
Escuchamos el silencio
en señal de venganza habitamos este instante
y conciertos de alas recorren tu cuerpo
mientras corro por ese bosque húmedo y tupido
trazando el camino de luz
el último señuelo al final del día.
No se hace nada en distancia equidistante
no se ocupan los sueños en banalidades del desacierto
aprovechar es la misión, el verbo, la costumbre animal
que carcome el deseo
y enciende esa hoguera.
Estamos aquí
para cumplir con nuestros deseos
ese furor juvenil que nos llama
en la noche a lo alto
atendámoslo
es ahora
o
nunca.
*
Las imágenes que acompañan al texto son propiedad de Paige Margulies.
***
Cualquiera diría apenas al verte que no eras todo pero eras suficiente… y otras declaraciones de amor. La poesía siempre será la mejor manera de expresar nuestros sentimientos, ya que nos expone de manera sincera frente al otro.