Durante mediados del siglo XX, México fue refugio para una camada de escritores estadounidenses que llegaban a la capital por distintas razones: huían de la justicia o buscaban un lugar más “puro” que el que había del otro lado de la frontera. Entre esos escritores, uno de los más importantes que llegó al Distrito Federal fue Jack Kerouac. El escritor Beat por excelencia, un santo y un demonio de la literatura moderna, es una de las figuras cuya biografía es importante para conocer su obra.
Kerouac fue un apasionado por las letras y el deporte, gracias a eso ganó una beca universitaria para jugar fútbol americano, pero pronto la perdió y tuvo que dejar la escuela. Para ese momento ya había conocido a otros poetas contemporáneos con los que trabajaría toda la vida.
Kerouac se interesó en el budismo gracias a estos hombres, en especial a Gary Snyder a quien retrató a la perfección en su libro The Dharma Bums, y pronto sus escritos autobiográficos y su poesía se vieron influenciados por la filosofía budista. Amante del jazz, Kerouac creía firmemente que esa música era la libertad budista expresada musicalmente, y que artistas como Charley Parker eran los profetas.
Es importante abordar estos puntos pues cuando Kerouac llegó a la colonia Roma en la Ciudad de México, se dedicó a escribir una serie de coros que más bien son haikus occidentalizados en los que retrató todo. La vida, la muerte, el miedo, la música, el arte y más se encuentran entre frases que a veces parecen no tener conexión alguna. Coros experimentales escritos bajo el efecto del alcohol, la marihuana y la morfina en un lugar sucio y bullicioso entre las calles de Orizaba y Colima –nada que ver con la actual colonia Roma cuya gentrificación la ha transformado totalmente- dieron como resultado el libro Mexico City Blues.
Más que conocer un contexto histórico, los siguientes coros, poemas o haikus, muestran un contexto psicológico. Un acercamiento poco usual a la obra de Jack Kerouac. Después de leer los espasmos mentales que plasmó en su libro de la Ciudad de México te recomendamos adentrarte en su obra novelística. On the Road o The Dharma Bums pueden ser un buen inicio para conocer a uno de los verdaderos outsiders de la cultura occidental.
"Quisiera que me concibieran como un poeta del jazz
Que interpreta un largo blues una tarde
De domingo en una sesión jazzística".
-Jack Kerouac
Coro 7
Él que se ha liberado de los conceptos arbitrarios
Del ser y no ser
El genio del elefante
El destructor que da muerte a los entrenadores
de elefantes
El destructor que da muerte a los elefantes
El destructor de la muerte
El destructor y exterminador
de la muerte
El exterminador del ser y el no ser
Thatagata
El maestro esencial
La gran matriz
El omnipresente
La esencia hecha hombre
El hombre hecho esencia
El creador de la luz
El destructor de la luz.
Coro 30
Suave es la noche
Suave es la estrella del crepúsculo
F.Scot Fitzgerald, el héroe
Huckster Crockett de Alamoan
Que quemó a su esposa
e hizo añicos a sus 45 diablos
con estallidos de risa y roturas de vasos
en el aristócrata Ibyarritz
el pequeño zorro gris
DE NEW HAVEN CONNECTICUT
vía Pinceton Sí señor
Tierno es el pasador
Tierno es el mar
Tierna es la neblina londinense
Que cae sobre mi
Tierno es el maullido triste
Del gato en el baño
El pequeño zorro gris
Que mordisquea las uvas
Tierno su prepucio
Tierno su cogote
Coro 78
A Porte Corrière
Del español
Portugués
Resplandeciendo
Por guitarras
Como vacas españolas
Ortega y gassa
Monte de eleor
De manta
Moda
Fawt
Ta caror
Ta fucka
Erv hombre
viejo
Coro 138
Es una verdadera noche de Brooklyn
la noche azteca
la híbrida noche tolteca
la noche de Saragossa
la noche tarasca
Jaqui Keracky
Cultiva opio
En el buen Culiacán
(ESPACIO EN BLANCO, el cantante
canta nada)
Coro 170
Descansar en Delicadeza
La lejana orilla de las esponjadas
nubes del cielo occidental de
Amida del reposo de diamante
es delicada
Y delicado es el idioma
español; delicado el español
que hablan en el alto desierto
donde el rey Sariputra
sostiene una barra de hielo
(quiero decir de diamante)
para ser leída por el máximo
y más sabio de los bondhi papas
de toda la fraternidad
Viejo Buda de los viejos
con sus mágicos interiores
fusionados en uno solo, Maitri
Canciones delicadas y arrulladoras
a las liras y guitarras
De las mentes lapis
Lázuli de los viejos santos
Coro 179
Glen Miller y yo éramos héroes
Cuando se descubrió
Que yo era el muchacho
Más bello de mi generación
Le preguntaron a Glenn Miller
Cómo conseguía inspirarse
Y componer para el saxofón
Y para los instrumentos con boquilla
Como sautergain y finn.
Y luego todos se pusieron a bailar
Y las estrellas lunares me besaron
Y me convertí en el Yokum
De la banda callejera, flores,
Y creí en la verdad y amé
La tierra nevada
Y no tenía camión
Ni responsabilidad alguna
Un bhikku en mi corazón
Esperando al terrible asesino
de la filosofía
BUDA
Coro 222
Cámara México
Camino sobre la calle de Orizaba
Mirando hacia ningún lado. Frente a mí
Veo una mansión bardeada
Con mucho césped, interiores estilo español,
Ventanas lujosas e impresionantes
Más allá borrachas hinchazones copuladas
Muebles silenciosos y diseminado
La historia de la calma y los
silentes cadáveres diseminados.
Ignorino el general indio
El jefe, guau
Del sur de sonora,
Tú conoces al tipo
¿cómo se llamaba?
Asserfelter Shnard Marade,
El husmeador de cola alta
Del sur de Slopetavia,
Krum, lleno de kerrs u kierke
gard....
y pum pah
Plap
Coro 241
Qué dulce se vuelve la historia
Cuando sabes que Charley Parker
la cuenta.
Igual en grabaciones que en vivo
O en pequeñas sesiones de clubs
Arponazos en el brazo con la bolsa,
Con gozo hacía silbar su
perfecto
instrumento
En realidad no hay diferencia.
Perdóname Charlie Parker.
Perdóname por no poder responderle a tus ojos
Que pudieras captar.
Chraley Parker, ora por mí
Ora por mí y por todos
Desde el nirvana de tu mente
Donde te ocultas benévolo y grande,
No hay más Charley Parker
Pero el secreto inefable
Que llevas merecidamente contigo
No se puede medir desde aquí
Ni desde arriba ni desde abajo,
Ni desde el este o el oeste.
Charley Parker aléjame de la perdición
A mi, a todos
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Fuente:
Kerouac, Jack.(2009) Mexico City Blues. Lumen. Buenos Aires, Argentina.