Antes de que comiencen los insultos… tenemos que aclarar: Game of Thrones es el título de la serie basada en la saga de libros Una canción de hielo y fuego, escrita por George R.R. Martin. Entonces, cuando decimos que los textos que presentaremos en este artículo son mejores que GoT, nos referimos meramente a ese trabajo que los productores David Benioff y D.B Weiss arruinaron por completo al trasladarlo a la televisión.
Claro, Game of Thrones ha logrado impresionarnos, hacernos reír, llorar, gritar, mirar muertes que nunca hubiésemos imaginado y una historia compleja e imperdible. Sin embargo, comparada con la obra literaria es una insignificante producción, especialmente en las últimas temporadas. La mala planeación (sin mencionar la falta de material escrito por Martin) resultará en un final forzado, sin la astucia de los diálogos ni la intensa creatividad del autor. Aunque la serie es una síntesis que ha ganado gran reconocimiento por sus méritos cinematográficos, en el aspecto narrativo aún deja mucho qué desear, especialmente cuando podrían tomar influencia de alguna de las otras obras del creador, las cuales, de forma individual, superan a GoT en ese aspecto.
Desde aventuras en el espacio hasta relatos clásicos de vampiros, antes de Una canción de hielo y fuego, Martin creó algunas de las mejores historias de fantasía y ciencia ficción que, por su parte, influenciaron su obra máxima. Su saga legendaria incluye una enorme cantidad de elementos que utilizó previamente y que incluso nos pueden dar pistas sobre lo que sucederá al final de la historia (la real, no la de la serie). De todos los títulos en su carrera, estos son los más relevantes y que demuestran que sus libros anteriores siempre superarán a GoT:
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La muerte de la luz (1977)
Su novela más representativa antes de que llegara la fama de Una canción de hielo y fuego. Situada en un país de un universo alternativo –como los llama el autor–, un planeta se está muriendo y el curso que lleva en el cosmos lo está llevando lejos de su fuente de energía, hacia un lugar frío y oscuro en el que nada puede sobrevivir. ¿Suena familiar? Similar a las estaciones del mundo de Game of Thrones, este libro lidia con un escenario muy distinto al nuestro en el que su estructura natural es el tema principal y uno de los peligros más grandes para la humanidad. El libro también aborda las peleas políticas que ciegan a las personas ante la amenaza que puede destruir a su planeta y aunque no es tan compleja como su obra más conocida, tiene todo lo que amamos de Martin y su visión extraña del mundo.
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El dragón de hielo (1980)
No. No es uno de los dragones de Daenerys controlado por los White Walkers, sino uno completamente distinto. El dragón de hielo es un libro infantil con temas inesperados, personajes entrañables y la menor cantidad de muertes en la carrera de George R.R. Martin. Adara es la joven protagonista, quien después de la muerte de su madre se hace amiga de la criatura que le da nombre al relato. Aunque es un texto dirigido para un público de corta edad, incluye un gran bagaje de fantasía e incluso se ha especulado que la historia toma lugar en el mismo universo que el de Una canción de hielo y fuego. De cualquier forma, sigue siendo uno de los tiernos relatos que nos muestran el lado más amable del sanguinario autor.
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Los reyes de la arena (1979)
Si crees que la historia de los distintos Dioses que aparecen en la obra más conocida del autor aún tiene muchas preguntas por resolver, quizá este libro te dé las respuestas que necesitas. Esta colección de cuentos cortos tiene como texto central la historia de un millonario que compra distintas colonias de reyes de la arena, las cuales son criaturas similares a las hormigas, pero también muy parecidas a los humanos. Esos pequeños entes miran al protagonista como una figura divina y él decide darles instrucciones. El problema aparece cuando los reyes se rehúsan a seguir sus órdenes y comienzan a crear sus propios planes. El resto de los cuentos que conforman la colección lidian con temas similares y nos hacen dudar sobre nuestra existencia… y la forma en que Martin crea a sus dioses.
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Nómadas nocturnos (1985)
Esta obra es diferente a gran parte de los trabajos de Martin, pero también incluye los elementos inesperados que amamos del autor. Inspirado en Odisea en el espacio y situado en el mismo universo que Los reyes de la arena y La muerte de la luz, el texto tiene como protagonista a un equipo de estudiosos que quieren realizar una investigación en el espacio, así que deciden abordar una nave Nightflyer con la mejor tecnología que se puede encontrar. Sin embargo, un ente parece estar controlando el transporte y comienza a amenazar la vida de los tripulantes. Al igual que el libro anterior, esta novela presenta a una especie de “titiritero” que controla a los personajes (aunque de forma indirecta) y mantiene la esencia cruda de las muertes prematuras a las que nos tiene acostumbrados Martin.
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Una canción para Lya (1974)
También situada en el universo de los libros que mencionamos (llamado el universo de los “Mil mundos”), esta novela posiblemente sea la más romántica en toda su carrera. Los personajes principales se llaman Robb y Lyanna (nombres que usaría después en Una canción de hielo y fuego) y son una pareja que viaja hacia otro planeta para investigarlo. El texto mezcla amor y ciencia ficción a la perfección. Mientras que los protagonistas viven una historia pasional descubren que los habitantes del lugar han comenzado a adorar a un parásito, pensando que es un dios. Tal ser pretende destruir ese planeta, pero nadie se da cuenta y siguen alabándolo para que los proteja. Es otra de las metáforas religiosas de Martin que nos hace pensar que los dioses de Game of Thrones podrían ser figuras reales que controlan ese universo.
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Sueño del Fevre (1982)
Este libro no está situado en otro planeta ni en un universo alternativo. Sueño del Fevre es una historia de vampiros al estilo tradicional del siglo XIX. Un excéntrico aristócrata contrata a Abner Marsh, un capitán de barco, para que lo lleve en un viaje a través del Río Mississippi. Aunque el millonario ha perdido casi todo lo que alguna vez lo hizo feliz, logra convencer al marinero con promesas de oro y riquezas. Sin embargo, al poco tiempo de emprender su travesía por agua, Marsh descubre que su empleador tiene una misión muy distinta a la que le había mencionado, ya que el hombre rico en realidad es un vampiro que desea unirse con la humanidad para cambiar al mundo y llevarlo hacia una nueva era. Es extraño, tenebroso, pero también despierta algunas preguntas filosóficas que hacen pensar en por qué vivimos y cuál es el propósito de estar en la Tierra, incluso siendo un chupasangre.
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Los viajes de Tuf (1986)
Un tema recurrente en la serie de Una canción de hielo y fuego es la dualidad de los personajes y cómo en realidad no existen los héroes y villanos, sino que todo depende de la perspectiva con que sean vistas las cosas; este libro es un análisis más profundo de ese hecho. Tuf es un alienígena bastante peculiar que tiene un fuerte amor hacia los gatos, sin embargo, su vida da un giro cuando se vuelve dueño de una nave de la Tierra con el poder de solucionar problemas ambientales y naturales. De esa forma, se adentra en el Universo para dar ayuda a algunos planetas, quieran o no, según su criterio. El problema surge cuando los habitantes de determinados mundos creen que en lugar de salvarlos, los está llevando a la perdición. Es una novela bastante analítica sobre la perspectiva y el efecto Rashomon, por lo que también le sirvió al autor como un ensayo para después integrarlo en su obra maestra.
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El talento de los realizadores de Game of Thrones es innegable, sin embargo, muchos de los elementos que usó Martin a lo largo de su carrera son olvidados y serían la perfecta adición para hacer de la serie una obra realmente legendaria. Quizá con un poco más de tiempo las cosas hubiesen sido distintas. De cualquier manera, los fanáticos seguirán viendo la serie. Siempre estarán estos libros que prueban que Martin es uno de los mejores autores de la actualidad y, sin duda, será recordado por su insólita imaginación.
