La espera es un acto de amor, sobre todo si es con las piernas abiertas…
Esta noche lo espero,
esta noche es suya y mía,
quiero dedicarle unas cuantas líneas o quizá
muchas…
Y es que usted me encanta.
A usted lo admiro.
Me gusta esa cabeza tan compleja y esa
sensibilidad con la que me abraza y nos conecta.
Me encanta cuando se va y cuando llega.
Me encanta extrañarlo.
Nos permanecemos, mientras nuestra libertad
nos mantiene aquí.
Me encanta descubrirle y que me descubra.
¿Sabe algo? Usted y yo somos la manecilla opuesta
del horóscopo.
Somos fuego, se lo expliqué hace dos noches.
Agua y Tierra, que se alimentan uno al otro.
Usted y yo simpatizamos.
Usted sostiene el espejo. El espejo en el
que veo mi reflejo.
Y, ahora,
dedo a dedo recorro cada par de sus músculos.
Metiendo con sutileza mi lengua inquisidora
en el baúl de sus labios, indagando
hasta sus cuerdas vocales.
Resbalando por la duna blanca y eterna
de su espalda.
Pongo cada pie en las orillas de sus muslos,
es ahí cuando veo al abismo correr aguas oscuras,
y una luz tan brillante e infinita al fondo,
incitándome y arrojándome al vacío.
Se alimenta de mi misterio, le divierte y le excita
y mi boca secándose lenta…
Así derramo poesía oscura mientras
lo espero del viaje,
En el sofá desnuda como la luna,
me siento ágil en esta nocturna e
iluminada pista, dejando que existamos.
**
El amor es el sentimiento más hermoso que podemos experimentar, y dedicar poesía es uno de los detalles más lindos que podemos tener o recibir de nuestra pareja; te compartimos cuatro poemas para que le digas “Te quiero a ti, con todo”.