Hoy es un buen día, hoy voy a ver a mi amigo José.
A José lo conocí en Cuernavaca, apenas después de la tragedia, a mi mamá no le gusta hablar de eso, pero yo no le veo nada de malo; ella dice que mi hermano se tomó muchas pastillas y por eso se quedó dormido para siempre. Pero mi primo Javier dice que era un motorolo.
Por eso empezaron los problemas; mi papá se volvió más borracho y le terminaba pegando a mi mamá, por eso a mi me mandaron al convento de Teques, a que el niño Dios me protegiera y me olvidara de la tragedia. El padre Manuel decía que para que yo me curara me debía abrazar, pero a mí no me gustaba que me tocara. A veces me lastimaba mucho y hasta me dolía cuando hacía del baño.
Un día mi papá se dio cuenta de eso, y yo le conté un poquito de la verdad porque tenía miedo de que Dios ya no me fuera a querer, por eso mi papá mató al Padre Manuel. Lo bueno es que mi papá es diputado y por eso no le hicieron nada los policías.
Así fue como me terminé yendo al rancho de Cuernavaca, donde conocí a mi amigo José. José es hijo de Don Pepe. Don Pepe es el ayudante de mi papá. Mi mamá dice que lo ayuda a lavar el dinero que está sucio, pero eso yo no le entiendo muy bien. Cuando yo lo conocí, José estaba muy triste porque sus papás le pegaban y yo me acordé de lo que me dijo el Padre Manuel, por eso yo lo toqué, y a José le gustó y se puso feliz.
Todos los fines de semana me gustaba acompañar a mi papá a Cuernavaca, para ver a mi amigo José. Ahora ya no lo he visto, dice mi papá que Don Pepe estaba muy borracho y se puso a jugar bucitos con mi amigo. Yo me puse muy triste cuando lo dejé de ver, pero al menos me pone de buenas saber que mi amigo ya no recibe los golpes que tanto le dolían.
Ayer fue jueves y los jueves no me gustan; a las 12 del día Don Richard pasa por mi a la escuela, él sí me cae bien porque me compra un gansito y un frutsi. A mi casa, la de lomas, llegamos como 12:30; mi mamá nunca se ha dado cuenta de que llego a esa hora porque a esa hora todavía está acostada con Roberto, el jardinero. Pero eso no me importa porque mis papás dicen que se aman, pero yo sé que se aman más cuando hay visitas, esos días hasta se agarran de la mano.
Hoy es viernes y voy a ir a Cuernavaca con mi papá, llevo mi traje de baño porque quiero alcanzar a José, quiero jugar bucitos con él.