El siguiente poema de amor de Gustavo Flores nos recuerda la desolación y oscuridad que llegan cuando el amor acaba.
NO VOLVER A AMAR
En estas tardes donde apenas se respira la vida y donde otros la pierden,
en un momento así, se me van las ganas de volver amar.
Mis amigos me dicen que lo intente, a pesar que las heridas duelan.
A mí se me acabo el amor como granitos de arena en un reloj,
todo mientras pasaba el tiempo, cuando las horas vuelan.
Yo tuve a alguien a quien amé hasta el dolor, con quien compartí mis martes,
y como en estas tardes bajo los últimos rayos del sol, igual la besé.
Me dejé los cuentos de madrugada, me dejé la vida amándole…
Que ya no me queda nada para vivir.
Y después de tanto tiempo, he decidido no volver amar.
Quizás en la soledad y mi nostalgia encuentre algo más.
Mas no doy nada por hecho, ¿quién dice que la vida está escrita?
Dios, si acaso eres tú, te pido me perdones.
Suelo equivocarme y no aceptar errores, puede que más tarde
trate de enmendarlos.
Y como respuesta final al no volver amar, me dejo estas ganas de salir
con alguien que me quiera, que me proteja con sus brazos.
Ya lo dije y lo volveré a repetir.
Yo tuve a alguien a quien amé hasta el dolor, con quien compartí mis martes.
Y como en estas tardes bajo los últimos rayos del sol, igual la besé.
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Si quieres leer poemas de amor y desamor, te invitamos a que conozcas a los autores de los poemas para los que se resisten a superar las decepciones y los poemas para los que no quieren olvidar.