Rey Pila se presentó por primera vez en el Lunario del Auditorio Nacional, lo hizo de una manera única y con un lleno absoluto. “The Future Sugar” es su más reciente producción discográfica y que de manera oficial dio inició su gira para promocionar dicho álbum.
La agrupación liderada por Diego Solórzano tuvo un acercamiento con su público al encender los ánimos de los presentes en poco más de hora y media que duró el show al estar frente a un público que los recibió eufóricamente.
A las 9: 45 de la noche fue el momento que Rey Pila salió al escenario para dar un espectáculo esperado por sus fanáticos; sonaban los acordes del primer tema “Alexander.
Seguido de “Surveillance camera”, “Blast”, “Order Police”, “No.114”, “The Future Sugar”, “Nerds”, “Picures of the Sun”, “Love is the Drug”, “Crashing Cars”, “Lady in Red”, “What a nice surprise”, “Apex”, este sería el comienzo de la noche que incluiría un set list con temas más electrónicos.
Posterior a un descanso breve en el que la banda alistaría los últimos tres temas del show que cimbró el recinto, así es como una vez salieron al escenario para interpretar “White Nigt”, “Fire away” y la que sin duda hizo brincar a su público fue “No longer fun” haciendo el cierre perfecto de un concierto emblemático para su público.
Con un juego de luces que hicieron que el concierto fuera espectacular, combinado con la música que Rey Pila interpretaba, el Lunario del Auditorio Nacional hizo estallar con cada canción. Las 17 canciones que interpretaron durante la noche se engalanó con un sonido que hacia mover el cuerpo a cada momento con su rock electrónico experimental.
Los músicos supieron hacer un buen concierto que los caracterizó durante la noche, con temas que sin duda te transportan a la década de los ochenta con tan solo dos álbumes: Rey Pila (2010) y The Future Sugar (2015) bastaron para hacer muestra de sus dotes sobre el escenario.
Finalmente el público y los músicos se entregaron por completo para disfrutar de la noche que ofreció un concierto que por vez primera hizo sonar el recinto en el que Rey Pila se llevó la noche.