Una noche caí
y lo miré bailar
dibujaba montañas con sus patas
montañas con venas de leche
la leche de los árboles rotos
Así fue
caminé a su lado
y diez años lo vi
tragarse la luna que se forma
alrededor de mis pezones
Amé un caballo
comprendí
el baile que rompe la semilla en miles de semillas
canté y di a luz un caballo de voz
una palabra negra
con coronas desgastadas por las montañas
negra y llana
pupila de la noche primera
casa vacía
Se alzó en dos patas
y su vientre buscó debajo de mi falda
una cueva de huesos donde crece el día y se quema
un animal del que florece mi caballo
mi caballo fue una boca desnuda
no soy el caballo
no soy la madre del caballo
tampoco la hija
no soy la amante
no hay caballo
Ahí donde dice caballo cierre los ojos y, con el índice, la boca de en medio.