Vuelve y dime que quieres
que bailemos a la vez tu canción favorita.
Que quieres compartir conmigo
el café caliente y las noches frías.
Que ahora
lo único que te importa
es contar el número de gotas
que caben en mi cara
cuando llueve.
Y el número de veces
que me descubres mirándote.
Dime a qué sabe mi boca
tras un día entero sin vernos.
Vuelve,
con el corazón en las manos
para que podamos darle (im)pulso.
Con la ilusión en los abrazos
y con las ganas en el cuerpo,
que vamos a reventar
de tanto querernos.
Vuelve,
quédate,
que vamos a leer a Escandar,
a beber,
a reír,
a vivir.
Hoy,
por una vez,
podremos elegir
quién queremos ser.
Y yo,
me volvería a elegir,
mirándote. Siempre.
Vuelve,
que vamos a deshacer los pasos
de la carretera de los errores
y esta vez sí,
aprenderemos a andar.
Vuelve,
con cualquier excusa,
pero hazlo.
Probemos el amor en todas sus facetas, también en aquellas ocasiones en las que nos enclaustramos en Habitaciones y creemos que el mundo afuera no es nada en comparación con ese universo; todo es cuestión de Perspectivas.
**
Las fotografías que acompañan el texto pertenecen a la artista española Silvi Grav