Esta semana despertamos con la noticia del arribo del segundo vuelo de la Fuerza Aérea Mexicana, proveniente de Rumania, con 57 mexicanos evacuados de Ucrania, país que es invadido por Rusia desde hace ya unas semanas y del que decenas de connacionales han intentado salir para regresar a casa y mantenerse a salvo.
Uno de esos casos fue el de Jesús, un albañil proveniente del Estado de México, que hace cinco meses salió a trabajar a Budapest y que por azares del destino terminó en Ucrania, un país que no conocía y del que mucho menos hablaba el idioma. Ahora, Jesús regresa a México, huyendo de la guerra y sin la paga por su trabajo.
Lo invitaron a hacer ‘pintura y pasta’
De acuerdo a Milenio, Jesús es un albañil originario del municipio de Ecatepec, en el Estado de México. A él lo invitaron a hacer pintura y pasta a Budapest y después a Ucrania, país que tuvo que evacuar debido a la invasión de las tropas de Vladimir Putin.
“Fue una persona la que nos llevó a Ucrania hace un mes, pero quién sabe quién es, de hecho se fue hasta con el dinero, ya ni nos pagó, sólo se fue, porque como fue ‘la sorpresa’ esa que nos tocó, pues así, ya no lo vimos”, relata Jesús al medio citado. Todo iba bien en Budapest, hasta que esta persona lo llevó a Ucrania a trabajar.
En referencia a los bombardeos, Jesús relata que no le tocó vivir “lo más feo” de la invasión. “Me tocó, pero no lo fuerte. Escuchamos el tronido y luego dijeron: ‘¡Corre, corre!’ y ya corrimos como pudimos. De ahí nos llevaron a Budapest (de nuevo), llegamos a una iglesia y nos trajeron a Bucarest, a un albergue, y ya, hasta aquí”, describe.
Su vuelo de regreso a casa
Jesús contó a Milenio que de esas personas evacuadas, 24 eran connacionales, mientras que 33 tenían nacionalidad ucraniana, aunque también mexicana. Su vuelo de más de 20 horas lo ocuparon para descansar a sabiendas que ya se encontraban a punto de regresar a su país.
El vuelo, según describe Jesús, fue extraño, tomando en cuenta que viajaba también con mascotas de algunos mexicanos, además de cajas con insumos y personal mecánico militar. Ahora, aunque regresó sin paga de Ucrania, agradece la oportunidad que le da la vida de contar su historia y de no haber sido una víctima más de la invasión rusa a Ucrania.
Recuerda que puedes mantenerte informado con nosotros a través de Telegram.