De acuerdo con la Universidad Autónoma del Estado de México, llegó el fin –oficialmente– para el teporingo, una especie endémica mexicana, al menos en el Nevado de Toluca. También conocido como conejo zacatuche, estuvo décadas en observación por ser un animal en peligro y la última vez que se avistó a uno fue en 2003.
Los teporingos también eran llamados “cuitlatepolli”, del náhuatl (“conejo de rabo corto”) o “cacatuche” (“conejo del zacate’’). (Foto: Local.mx)
Desde 1996, esta especie exclusiva de México ya se consideraba en peligro de extinción y varias investigaciones realizadas desde la década de los 80 y los 90 ya apuntaban a su desaparición. Finalmente, la noticia se confirmó después de una investigación realizada en 2017 por el Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas (CICBA).
¿Por qué se nos fue?
Se considera que el crecimiento urbano y las actividades agropecuarias que afectan al bosque del Nevado de Toluca en el Estado de México, de donde proviene este animal, fueron en gran parte los causantes de la extinción definitiva de la especie.
Foto: QueCome
Actividad humana
Cuando se extingue una especie, no tiene que ver siempre con los factores humanos, no nos condenemos tan gravemente. Sin embargo, en esta ocasión la extinción del teporingo implica factores humanos pues la amenaza que tenían estos conejos mexicanos se relacionaba directamente con ellos, pues el crecimiento de las poblaciones fue reduciendo velozmente su hábitat.
Otros factores como la contaminación, la deforestación, los incendios forestales, el pastoreo, la extracción clandestina de madera, pastos y suelo cooperaron también a su desaparición.
Además, estos animalitos solían ser comercializados para el consumo humano. Los aficionados a la cacería los asesinaban, sobre todo en la zona de neovolcanes del Estado de México.
“La ausencia de esta especie en el bosque del Xinantécatl representa“un llamado de atención a la humanidad ante la falta de conservación de su hábitat”, mencionan los biólogos.
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Fisionomía del teporingo
El teporingo mide alrededor de 30 centímetros de largo y tiene una cola vestigial de entre 20 y 30 milímetros. Tiene orejas de 40 milímetros, más pequeñas que las de otras especies de conejos. Pesa tan sólo 600 gramos y tenía pelo corto color negro y amarillo. Tiene un triángulo característico de pelo rubio en la nuca.
También se les llama “tepolitos”, “burritos” o “volcano rabbit” y conejito de los volcanes. (Foto: Chilango)
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