Nadie imagina a Catherine Deneuve caminando con los maravillosos zapatos belle vivier en Belle de Jour mientras usa unas calcetas gruesas, un par de jeans rotos o una gabardina rosada…
No, este par de zapatos de hebilla y tacón cuadrado jamás habrían lucido bien de otra manera que no fuera como los portó la actriz; es decir, con vestidos y medias en color nude y negro. Aunque ahora podemos usarlos de muchas otras maneras, la mejor forma es, sin duda, al estilo bella de noche.
Esto lo logró gracias a su combinación perfecta y a que, Deneuve, rara vez perdía el camino al momento de elegir sus zapatos y su ropa. Ella, a diferencia de muchas personas, jamás cometía una de las equivocaciones siguientes. Pero no todo fue fácil. Para lograrlo pasaron años de práctica. Así que, aprende primero de los errores más comunes para darle paso a una nueva forma de combinar tus zapatos que te harán ver fabulosa sin temor a la equivocación.
Combinas tus zapatos sólo con tu bolso
¿Por? Esa regla es muy oldie. Renuévate y usa los zapatos que te gusten, aunque no combinen tanto con tu bolsa del día. Si crees que es una regla muy drástica, puedes llevar ambos objetos en la misma paleta de colores, y así no sentirás que desentonas.
No les das protagonismo
Gran error. A veces, tus zapatos pueden ser el mejor complemento del outfit. Si llevas un look monocromático, tu calzado es como un acento. No sólo le brindarás un toque de color, sino que serán aquello que resalte a primera vista.
Sólo usas un tipo de zapato
Puede que seas sneakerhead, high heels lover o que sólo te gusten los flats. Está bien; sin embargo, no puedes ponerte lo mismo para todo. Hay ocasiones en que los tenis son la mejor opción, y otras en que los tacones te dan mucha más personalidad. Analiza tu día y usa los zapatos ideales. No tengas miedo.
No te informas sobre el clima
Parece broma, pero no es así. Si verificas el clima para saber qué outfit usarás y así no pasar frío o calor, no dudes en hacerlo también para combinar tus zapatos. A veces, eso es más importante, ya que evitas problemas como el mojarte los pies, sufrir de calor intenso o de frío innecesario.
Combinas tu calzado sí o sí con alguna de las prendas
No está del todo mal, pero no pasa nada si ninguna de las piezas de tu look hace juego con los zapatos. Trata de mantener todo en una sola paleta de colores o juega con la regla de los tonos, pero no más.
Usas calcetas o medias que no van acorde con el zapato
Recuerda que tus pies son una especie de presentación, así que evita por completo llevar calcetas blancas o de figuras cuando sabes que se verán a través del calzado –a menos que tu outfit lo amerite–, como las sandalias o los tenis muy bajos. Cambia por calcetines pequeños o negros.
Te excedes en detalles
Y tus zapatos deberían ser los protagonistas o, al menos, darle a tu atuendo el toque principal. En cambio, si exageras en accesorios, colores o en capas de ropa, sólo conseguirás tener una saturación que no va a ningún lado.
Si aprendes a combinar de manera correcta tus zapatos, el resto de tu outfit será mucho más fácil de armar. Sólo intenta hallar armonía entre tu calzado y tu ropa. No es difícil, pero requiere de mucho tiempo de práctica; así que no te rindas y podrás dominarlo en el momento menos esperado.
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