Marcada en rojo en el calendario para todos los amantes de la moda; la gala anual del Museo Metropolitano de Arte, conocido simplemente como el Met, celebrada en Nueva York es sin duda uno de los eventos más importantes en la Gran Manzana. Una gala reservada exclusivamente para los más pudientes, en donde nunca faltan los nombres más sonados de Hollywood y los de los grandes maestros de la costura. Una noche única en donde estos “VIPs” se reúnen en el museo Met para una buena causa: recaudar fondos para el Instituto de Vestuario del Museo.
Cada año, la gala acoge una temática única que emula la exhibición expuesta en el Instituto de Vestuario, en donde los participantes deben lucir modelos que encarnen esta temática. Artistas como Rihanna, Solange, Sarah Jessica-Parker o Zendaya son el objetivo deseado de grandes maestros de la costura en una oportunidad única para revelar sus últimas piezas. No obstante, no sólo el glamour femenino acapara todos los focos. Grandes figuras masculinas como Pharrell, Kayne West, Jared Leto o John Legend también acuden frecuentemente a este evento dispuestos a dejar su huella.
Pero, ¿cuánto sabes acerca de la historia de la gala del Met? Descubre aquí su historia, sus últimas temáticas y, lo más importante, sus mejores secretos.
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¿Cómo empezó todo?
La gala del Met, formalmente conocida como el Gala del Instituto de Vestuario, fue fundada en 1948 por Eleanor Lambert, una conocida publicista de moda. La idea detrás de este evento era recaudar fondos para el recién inaugurado Instituto de Vestuario con una exhibición anual.
A pesar del glamour y riqueza que el evento despierta en la actualidad, sus inicios fueron mucho más humildes. En un principio, la gala constaba de una cena hasta la medianoche, en donde los asistentes pagaban unos 50 dólares por los alimentos, en comparación con los 522 dólares que se pagan actualmente.
Aunque la mayoría del público asocia el evento con el museo Metropolitano de Arte, lo cierto es que la gala tuvo también otras “casas” incluyendo el hotel Waldorf-Astoria, el hotel Central Park y la Sala Arcoíris en el edificio Rockefeller.
Fue hasta 1972 cuando la Gala del Instituto de Vestuario se trasladaría finalmente al escenario que conocemos. La idea de crear esta sede permanente para el paraíso anual de celebrities y amantes de la moda, se la debemos a la que fuera editora de la revista Vogue, Diana Vreeland. Desde su incorporación, Vreeland ha estado al mando de la sede y las temáticas de cada año.
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¿Cuánto cuesta celebrar la gala?
Aunque no existe una fórmula secreta para el éxito, la preparación es esencial; por ello, el evento se prepara con un año de anticipación para lograr que sea una noche perfecta. Con la atención mundial puesta en esta gala, no hay margen de error; un evento de estas características exige mucha preparación, pero también implica una gran inversión. Según el Wall Street Journal, el costo de realizar la gala del Met asciende a unos 3.5 millones de dólares.
Una noche memorable sólo sería posible con una actuación inolvidable; y es ahí en donde se va la mayor parte del presupuesto. El año pasado Madonna fue la encargada de hacer las delicias del público en un espectáculo mágico, una actuación por la que la artista se embolsó 1 millón de dólares, según la agencia Degy Entertainment. Sin duda, la felicidad de los invitados no tiene precio.
Y como símbolo de glamour, nada en este evento es barato; ni siquiera las entradas. La organización vende alrededor de 550 boletos en total, con un precio de 30.000 dólares cada uno. Sólo con la venta de entradas se estima que la organización recauda unos 16.5 millones de dólares entre todos aquellos que quieren cruzar la deseada alfombra roja.
Pero no termina ahí; patrocinadores y marcas alquilan mesas para los famosos por las que pagan entre 275 mil y 500 mil dólares cada una. Aunque los precios quizás parezcan estratosféricos, no son nada comparados con los 3 millones de dólares que Yahoo pagó en 2015 por dos mesas.
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Temática
El tema de la gala Met para este año es “Camp: Notes on Fashion”, y nada tiene que ver con tiendas de campaña. El tema se centra en reflejar el amor por lo antinatural, lo excéntrico, y exagerado; una temática nada habitual que tendrá presentadores singulares como Lady Gaga, Alessandro Michele, Harry Styles, Serena Williams, y Anna Wintour.
En cuestión de temas, ha habido para todos los gustos; entre los favoritos se encuentran la celebración de los 25 años del diseñador Yves Saint Laurent en 1983, donde la gala Met conmemoró la gran contribución del maestro francés al mundo de la moda con una exhibición impresionante de sus colecciones. No obstante, la noche no fue íntegramente dedicada al diseñador, muchas de las celebrities invitadas no lucieron ninguno de sus diseños ¡y la mayoría llevó el mismo conjunto!
Otro de los temas más comentados fue Jacqueline Kennedy: Los años de la Casa Blanca en 2001, donde muchas estrellas eligieron como inspiración el estilo de la Primera Dama, con vestidos largos de seda y piezas de joyería. La propia hija de la fallecida, Caroline Kennedy, también acudió al evento y para muchos fue la mejor encarnación de su madre.
Mientras que el tema del año pasado fue Heavenly Bodies: Fashion and the Catholic Imagination (Cuerpos celestiales: moda y la imaginación católica). Sin duda, uno de los temas que mayor atención mediática ha acaparado en la historia de las galas Met; religión y opinión pública siempre son sinónimos de debate, especialmente si se transmiten a nivel mundial. El año pasado, la gala traspasó fronteras con los exhuberantes atuendos de los asistentes. ¿Te acuerdas el vestido de Rihanna simulando al Papa? ¿O quizás Lena Waithe con una capa con los colores del orgullo gay?
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Los secretos de la gala Met
Llegamos a la parte importante del evento, ¿pensabas que todo iba a ser sobre vestidos de fiesta? Detrás de todo el glamour, Hollywood y las celebridades hay muchos más secretos que quizás no sabías. Aunque los medios de comunicación hacen un montaje de nuestras parejas favoritas, la verdad es que muchos de ellos ni siquiera se conocen hasta la gala. Y por supuesto. Los organizadores se encargan de “emparejar” las mesas para que surja más de una chispa durante la noche. ¿Sabías que Taylor Swift y Tom Hiddleston comenzaron su romance después de compartir una mesa durante la gala de 2016?
Y ¿qué mejor forma de inmortalizar una noche tan increíble que una foto? Lo creas o no, los selfies para Instagram están absolutamente prohibidos en la gala Met. No obstante, eso no ha detenido a muchas celebrities cuando se trata de compartir su noche en línea, ¿recuerdas el selfie de Kylie Jenner en el baño? Hablando de baños, muchos famosos se dan más de una escapada al baño para fumarse algún cigarro aunque, obviamente, esto tampoco está permitido.
Ahora, en un espectáculo de estas características no podían faltar platillos exclusivos, pero la mayoría de los asistentes ni siquiera tiene tiempo para dar un simple bocado, entonces ¿qué hacen los famosos durante toda la noche? Hablar de los vestidos y atuendos, tomarse selfies secretas, y no nos olvidemos, disfrutar del show.
Al término de la gala, muchos diseñadores subastan las piezas para recolectar dinero para otras buenas causas; el pasado año el director creative de Balmain, Olivier Rousteing, vendió todos sus libros y obras y donó la recaudacion a RED, una firma que se encarga de concienciar al sector privado acerca del problema de la proliferación del VIH en países africanos. Aunque muchas de estas obras tenían un valor original mucho más elevado, la mayoría fueron vendidas por precios entre los 2 mil y 5 mil euros.
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