Nadie ha resumido con tanto acierto la razón por la que una chica decide cortar su cabello de la noche a la mañana sorprendiendo a los amigos, a la familia e incluso, a su propio reflejo como Coco Chanel.
«Una mujer que se corta el pelo, está por cambiar su vida».
Es cierto. En las estéticas y salones de belleza, la mayoría de las asistentes acuden con el propósito de cambiar su melena al mismo tiempo que modifican el rumbo de sus vidas, por lo que deciden quitarse de encima un poco de peso, como si se tratara de una metáfora sobre sus problemas y también se fueran con todo ese cabello que cae al suelo luego de que las tijeras pasan por él.
No obstante, hay algunas mujeres no tan atrevidas que aún así quieren un cambio y dejar sus problemas en el cesto de la basura, así que deciden hacerse flequillo. Éste es un cambio en el rostro y al mismo tiempo es una forma de continuar con un estilo propio. Sin embargo, un fleco puede ser mucho más abrupto que un corte de cabello en sí. Quizás estás tomando una decisión muy apresurada si has decidido cortarlo.
¿En verdad estás emocionalmente apta para hacerlo? Contesta las siguientes preguntas antes de usar las tijeras.
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1. ¿Lo estás haciendo porque viste la nueva tendencia en Instagram?
¡Bien! Pero recuerda que no todo es lo que ves online es lo mejor.
2. ¿Crees que tu rostro luciría más delgado si pruebas un flequillo de lado?
Tal vez, pero primero debes conocer tu rostro a la perfección y saber qué tipo de fleco va contigo.
3. ¿Notaste que todas tus amigas con fleco tienen más pretendientes?
No dejes que sea un trozo de cabello el que lleve la responsabilidad de tu vida amorosa.
4. ¿Te han dicho “fea” o algo similar por no usar el peinado en tendencia —que incluye copete—?
La belleza se construye desde varios puntos, no sólo tu melena.
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5. ¿Te han dicho que tu peinado no está de moda?
Considera si en verdad es por no tener cabello sobre tu frente…
Quizá tu problema radica en la autoestima. El flequillo es un estilo que puede cambiar tu rostro y es capaz de convertirlo en tu mejor arma ante la vida o en tu peor enemigo, así que debes pensar bien cómo hacértelo. Sin embargo, si crees que usando un poco de cabello sobre tu frente cambiarás tu vida, estás en un grave error. La confianza y amor propio deben nacer desde tu “yo más natural”. Esa persona que se baña en las mañanas sin un sólo producto químico encima, esa chica que se recuesta en pijama de osos y aquella que se sienta frente al televisor recargada en sus rodillas son tu mejor versión. Siéntete orgullosa de lo que eres y de lo que tienes, no importa cómo sea tu cabello, tu rostro o tu forma de caminar.
6. ¿Conociste a alguien y quieres probar cosas nuevas?
Bien por ti, pero el cabello no debe ser lo único a cambiar.
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7. ¿Has pasado por alguna ruptura (amorosa, amistosa, laboral, familiar) y quieres empezar desde cero?
Recuerda que los cambios siempre son positivos, pero no basta con estilo capilar nuevo.
8. ¿Has cometido algún crimen y necesitas un estilo nuevo?
No, el fleco no es suficiente. Sí, sabemos que es improbable, pero un cambio de vida puede implicar muchas cosas.
9. ¿Te sientes sola y crees que con un peinado nuevo puedes conocer otras personas?
Aunque las chicas con peinados atractivos suelen tener más personas a su alrededor —científicamente—, no es garantía de estar acompañadas, reconsidera trabajar otros puntos de tu vida.
10. ¿Quieres demostrar madurez ante la vida con un nuevo look?
Tal vez te independizaste, tienes un empleo y un novio que te ama, pero aún te cuesta trabajo tu nueva vida… un cambio de look ayuda, pero no es suficiente, tienes que ver otros puntos, no sólo tu cabello.
Tal vez necesitas un par de cambios ante tu forma de vivir o demostrarle a los demás que sí puedes ser una mujer madura frente cualquier situación. Si es el caso, no dudes en hacerlo, pero recuerda que tu peinado no es el responsable de dar una imagen específica. Siempre dependerá de ti y de tu actitud, y aunque es una gran ayuda —al menos un indicador de que algo ha cambiado— no puedes dejar que tu hairstyle lleve tanta responsabilidad.
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11. ¿Crees que sería más fácil peinarte?
Tal vez, pero siempre cuesta trabajo al principio, así que quizá le dediques más tiempo por las mañanas.
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12. ¿Crees que te verás mayor?
A contrario. Por lo general, el flequillo te hace ver más pequeña.
13. ¿Quieres alocarte?
Muy bien, pero antes considera si tu look entra en esa categoría y si tu trabajo o escuela te lo permiten.
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14. ¿Siempre has tenido el mismo peinado?
El fleco lo cambiará, pero no al 100 %.
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15. ¿Piensas que la perspectiva de otros hacia ti cambiará?
No, desafortunadamente no sucede, pero la forma en que te ves a ti misma sí se volverá más positiva.
Probablemente, sólo quieres un cambio de look y es comprensible. Todas queremos lucir diferente siempre, pero puedes empezar a hacerlo de manera gradual, es decir, peinándote diferente, usando ropa que tenías abandonada en el armario o probando estilos. El fleco puede ser la última de las pruebas a las que debes atenerte. Un fleco puede cambiar por completo tu rostro, pero tampoco es señal de que estás cambiando de look por completo. No hay nada como encontrar un punto de equilibrio entre tu estilo y nuevas ideas.
No es que necesites de un cambio de look tan intenso como el flequillo, piensa bien qué es lo que necesitas y tal vez sólo tengas que modificar tu peinado y tu estilo. Se ha comprobado que hacerte copete es una señal mucho más intensa de que algo anda mal en tu vida, puesto que no te atreves a cambiar por completo, pero tampoco estás dispuesta a seguir siendo la de antes. Por esto mismo, debes considerar todas y cada una de las preguntas anteriores y así lograrás identificar si en verdad necesitas un cambio en el rostro o quizá debas aceptarte y tratar de superar tus problemas con ayuda de tu amor propio.