La Reina Isabel no se separa de su bolso, cada evento al que va no puede faltar la pequeña pieza de cuero negro colgada de su brazo.
Imagen: IG @theroyalfamily
Ese accesorio es muy importante tanto para su look como para la comunicación con su staff de seguridad. Es muy poco atrevida con diseños, en realidad cuando era joven apostaba por más colores pero ahora la pieza negra y ella se han vuelto inseparables.
Su última pieza favorita se trata de un Launer, la marca que la monarca ha dejado como de cabecera desde hace 60 años. Gerald Bodmer, el consejero delegado de la firma, contó que los últimos diseños hechos para la Reina son más livianos que el resto de sus bolsos para que se sienta más cómoda mientras lo usa. Tiene más de 94 años, es totalmente entendible que necesite algo más ligero.
Bodmer está más que encantado con la publicidad que la serie ‘The Crown’ le ha hecho ya que con lo observadores que son, por supuesto que lo agregaron al vestuario de la producción.
¿Cómo llega un bolso Launer al armario de la Reina Isabel?
Gerald contó que Angela Kelly, la encargada de todo lo que la Monarca usa, le ordena a la marca los requerimientos para Isabel II. Como orden siempre menciona que es de suma importancia que sean fabricados en Reino Unido.
“La Reina sabe lo que quiere y si no le gusta lo que le hemos hecho, no lo usará. Solemos trabajar en un bolso que ya tenemos y luego personalizarlo con lo que Angela sabe qué quiere la Reina o con necesidades específicas según determinados compromisos”, dijo Bodmer.
Foto: IG @theroyalfamily
¿Cuánto cuesta un bolso como el de la Reina Isabel?
Los precios varían según el modelo pero rondan por los mil 900 y dos mil 800 euros, o sea, entre 42 mil y 62 mil pesos mexicanos.
¿Qué lleva la Reina Isabel en su bolso?
Es la pregunta del millón. Por supuesto que sus creadores no lo saben pero con los años se ha filtrado el contenido que la mamá del príncipe Carlos lleva a todas partes.
Siempre guarda un labial que combina con la túnica de su coronación hecho especialmente para ella, un gancho para sostener el bolso a la mesa, un estuche con gafas, pastillas de menta o algún chocolate, una pluma, dinero en efectivo para dejar en el cesto de donaciones cuando acude a un evento religioso y amuletos de buena suerte como fotos familiares, de sus perros, caballos y sillas de montar en miniatura.
Pero eso no es todo, la Reina ha usado su bolso incluso para comunicarse con su equipo. Tienen una especie de códigos para saber cómo se siente a la distancia pero de forma discreta.
Por ejemplo, Hugo Vickens, historiador y experto en la familia real, dice que si la Reina Isabel cambia su bolso de mano quiere decir que está lista para terminar una conversación, si lo pone sobre la mesa indica que quiere irse y si lo deja en el suelo quiere decir que la conversación no le pareció interesante y pide la intervención de su dama de compañía.
Foto: IG @theroyalfamily
Interesante ¿no? Al final el accesorio que tanto le gusta a la Reina terminó siendo una forma de comunicarse discretamente con su equipo.
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