Déjanos adivinar: en tu clóset hay jeans negros, alguna chaqueta de mezclilla, tenis blancos, una camisa a cuadros…
Sí, sabemos que son prendas básicas que todo hombre y mujer debería tener, pero también son muy (muy, muy) peligrosas, ya que una vez que conoces la maravilla de los basics, puedes envolverte en ellos y no salir de un look —justamente— básico
Mismo que eventualmente se tornará repetitivo y aburrido. Aburridísimo.
Entonces, ¿por qué lo usas?
El hecho de tener un armario inteligente y vestir con piezas elementales no quiere decir que lo debas hacer siempre igual o que se vuelva una especie de rutina. Recuerda que la esencia de los classics es su practicidad mas no la sencillez. De ti depende darle un upgrade a esa ropa y dejar atrás el look aburrido.
Si no sabes cómo hacerlo, tal vez debas leer estas señales que te dirán si sufres del síndrome del armario aburrido; es decir, tener los basics recomendados y usarlos de forma tan simple que provocan bostezos.
Señal #1: En tu clóset predominan los colores básicos: blanco y negro.
Señal #2: Parece que usas un uniforme, por lo menos, 3 días a la semana.
Señal #3: ¿Accesorios? Mmm… No, no hay en tu clóset.
Señal #4: Nadie nota la diferencia entre tu outfit de oficina y el de fiesta.
Señal #5: Hace mucho tiempo que no agregas ni te deshaces de alguna prenda.
¡ALERTA!
Si al menos 3 de esos síntomas te representa es porque, en efecto, padeces de dicho síndrome (o estás a punto de caer en él ).
No te preocupes, nosotros te presentamos una solución simple, efectiva y rápida para darle un respiro a tu clóset y dejar atrás el boring look.
Es genial que tu armario esté lleno de piezas básicas como jeans, una leather jacket o una falda negra, y que puedas combinarlas sin complicación; sin embargo, es necesario que los lleves un paso más allá. ¿Cómo? Agrega un detalle insospechado en tu outfit. Puede ser un par de zapatos coloridos, una blusa con glitter o un accesorio en la cabeza.
No te uniformes nunca. Ponte una regla en la que no puedas usar una prenda más de una vez a la semana. Si decides usar una playera blanca hoy, no te la vuelvas a poner hasta la siguiente semana. Intenta hacer lo mismo con el calzado y las chaquetas. Así te verás diferente.
No dudes en tener accesorios básicos. Un choker, un par de arracadas, un reloj sencillo… No te limites.
A veces, para entender y diferenciar tus looks es necesario que uses algo distintivo en cada ocasión y que unas las distintas prendas que posees (aunque creas que no van bien juntas). Ponte un cinturón ancho encima de tu blazer negro, usa un suéter colorido con tu falda y, por qué no, móntate en tus sttilettos cuando uses una hoodie. Arriésgate.
Sabemos que eres fan de los armarios básicos, pero no está mal salirte un poco del patrón. Compra de vez en cuando algo que esté en tendencia por poco tiempo (como las lentejuelas, las telas atinadas o los colores de temporada), un par de zapatos inusuales o simplemente retoma alguna prenda que tengas arrumbada al fondo del armario.
En realidad, el síndrome del armario aburrido es sólo una consecuencia de la velocidad con que vivimos. Es normal que llegue un punto en tu día a día en el que tu mente se cierre y no sepas qué hacer con cada una de las piezas que conforman tu armario; sólo trata de darle un toque extra a tu outfit con otro elemento igualmente sencillo. Verás que te convertirás en la mejor vestida de manera fácil e inteligente.
Boring look sucks!
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