En los últimos años, luego de tomar medidas más severas contra la caza furtiva, esta actividad ilícita ha disminuido considerablemente. Sin embargo, a pesar de ello, el elefante de África sigue bajo la amenaza de desaparecer por la alta demanda de marfil.
Según un estudio publicado esta semana en Nature Communications, la población de los elefantes estaba estimada en varios millones a principios del siglo XX, pero la última evaluación de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN), hecha en 2016, daba reveló que la cifra ya era menor a 415 mil, lo que significa una caída de 111 mil en diez años.
(Foto: Elefantes)
Y aunque la caza furtiva, en estos últimos años, pasó de un pico de 10 por ciento de mortalidad en 2011 a cerca de 4 por ciento en 2017, al ritmo actual, los elefantes de África, clasificados como “vulnerables” en la lista roja de la UICN “están en peligro de desaparición casi total en el continente”.
Los investigadores identifican por otra parte los principales factores de ataques contra este animal, en primer lugar la demanda de marfil en Asia, especialmente en China. Los investigadores también subrayan el vínculo con pobreza y sobre todo con la corrupción en África. Sobre el tema de la demanda de marfil, el estudio muestra una baja en paralelo con la prohibición por parte de China de su comercio desde 2017.
Aunque no todo el panorama es malo, pues tanto en Botsuana, como en otras regiones del país, el número de elefantes se ha multiplicado.
Además de ser uno de los animales terrestres más emblemáticos, el elefante es importante para el turismo y sobre todo es crucial para las sabanas o junglas en las cuales vive y disemina granos.