La deforestación en la Amazonia es un problema que ha avanzado a pasos agigantados en los últimos 50 años. Actualmente, el 17 % de la vegetación de la región fue deforestada, y de llegar al 20 % la selva corre peligro de convertirse en un sitio árido, advierte el meteorólogo Carlos Nobre, quien ha comprobado la catástrofe junto con la Unesco.
Nobre junto con el biólogo Thomas Lovejoy emprendieron una iniciativa en la década de los 90 del siglo pasado para comprender cómo funciona hidrológica, climatológica y ecológicamente la Amazonia. En su estudio Experimento a Gran Escala de la Biósfera-Atmósfera de la Amazonia, concluyeron que la zona está acercándose a un punto de no retorno.
«Si el clima cambia por la deforestación o el calentamiento global, existe el riesgo de que más del 50 % de la selva amazónica derive a un paisaje degradado de baja biodiversidad, tipo sabana», le dijo Nobre a Euronews.
En Colombia, el 26 de febrero el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, confesó que cumplir la meta de “cero” deforestación en el Amazonas para 2020 será imposible. (Foto: Pixabay)
La tala y la quema de áreas verdes que son una constante últimamente en La Serranía de La Macarena y en Guaviare, Brasil, será imposible que la Amazonia complete sus ciclos hidrológicos, con ello habrá menos lluvia y así la deforestación hará el resto del trabajo para la sequía.
Pero si yo vivo en otro país, ¿qué me importa que se acabe el bosque de la Amazonia? La incidencia de la sequía en la Amazonia será directa en gran parte de América del Sur. Paraguay, Brasil, Uruguay y Argentina serán lo más golpeados con la humedad de la zona. Por lo demás, habrá una sequía gradual que cambiará el sistema ambiental mundial. Incendios e inundaciones a gran escala y la baja de especies serán los principales problemas de la humanidad.
Mientras, lo único que puede frenar las acciones de destrucción es voluntad política en leyes e implementación de éstas para que la deforestación no sea la realidad de la que haya que arrepentirse. Pues si el 20 % se cumple en 2020, será imposible dar marcha atrás en el desastre ambiental.
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