Para Alia Ghanem, madre de Osama Bin Laden, su hijo fue infectado por un culto terrorista que lo llevó a cometer uno de los atentados terroristas más brutales en la historia mundial reciente. En entrevista con The Guardian, la familia Bin Laden manifestó su conmoción por la radicalización del hombre al que conocieron como un buen hijo y hermano, hasta que se convirtió al terrorismo en la década de los noventa.
Alia Ghanem vive con el recuerdo más ingenuo de su hijo, ella lo describe como un niño tímido y estudioso; “Era muy ordenado. Muy bueno en la escuela, realmente le gustaba estudiar” dijo.
Alia Ghanem habló por primera vez sobre la vida de Osama. (Foto: David Levene/The Guardian)
Pero Ghanem no ha podido reconocer la realidad del ser en que se convirtió Osama, para ella su conversión el radicalismo fue influenciada por personas que cambiaron su forma de pensar. “La gente de la universidad lo cambió” dice Ghanem. “Se convirtió en un hombre diferente”.
“Fue un niño muy bueno hasta que conoció a algunas personas que prácticamente le lavaron el cerebro a los 20 años. Puedes llamarlo un culto. Recibieron dinero por su causa. Siempre le decía que se mantuviera alejado de ellos, y nunca me admitiría lo que estaba haciendo, porque me amaba mucho”.
Mientras Osama estudiaba economía en la Universidad Rey Abdulaziz en Jeddah se radicalizó, allí conoció a Abdullah Azzam, un miembro de la Hermandad Musulmana que más tarde fue exiliado de Arabia Saudita y se convirtió en su consejero espiritual.
Osama Bin Laden (segundo derecha) es recordado como un buen hijo por su madre. Aquí es fotografiado con un grupo en una visita Suecia en 1971 (Foto: The Guardian)
Los medios hermanos de Osama, Ahmad y Hassan, acompañan a su madre en la entrevista. Hassan intenta explicar cómo su hermano fue cambiando su personalidad, “Estoy muy orgulloso de él en el sentido de que era mi hermano mayor. Él me enseñó mucho. Pero no creo que esté muy orgulloso de él como hombre. Alcanzó el estrellato en un escenario global, y fue en vano ” declaró.
La familia dice que vio por última vez a Osama en Afganistán en 1999, Alia Ghanem describe aquella ocasión en que lo visitaron dos veces en su base a las afueras de Kandahar. “Era un lugar cerca del aeropuerto que habían capturado a los rusos. Estaba muy feliz de recibirnos. Nos estaba mostrando todos los días que estuvimos allí. Él mató a un animal y tuvimos una fiesta, e invitó a todos “.
Hasta ahora la familia Bin Laden ha podido continuar con su vida de manera ordinaria en Jeddah, la ciudad de Arabia Saudita, pero el pasado de uno de sus integrantes será difícil de borrar.
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