Una mujer podría pasar hasta 60 años en prisión tras ser acusada de fraude, pues solicitó un préstamo en Estados Unidos, alegando que tenía un negocio que quebró debido a la pandemia de coronavirus, aunque en realidad habría usado el dinero para comprar diversos objetos personales, incluidos ropa y joyas
Jasmine Johnnae Clifton, de 24 años y residente de Charlotte, Carolina del Norte usó su préstamo de 150 mil dólares (aproximadamente 3 millones 134 mil pesos mexicanos) para comprar productos en lugares como Louis Vuitton, Nordstrom, Neiman Marcus, IKEA y varias tiendas de diamantes.
(Imagen ilustrativa: Unsplash)
Pidió el préstamo para un negocio que ya no existía
En febrero de 2019 la mujer había creado la tienda de ropa en línea Jazzy Jas LLC. El 24 de julio de 2020 solicitó el préstamo de la Administración de Pequeñas Empresas de Estados Unidos (SBA, por sus siglas en inglés) para la compañía, de acuerdo al expediente.
¿El problema? Según la acusación, la empresa ya no existía en ese momento. Se había disuelto formalmente con el secretario de Estado de Carolina del Norte meses antes en marzo de 2020. Sin embargo, de manera efectiva, se disolvió en septiembre de 2019.
La mujer aprovechó dicha empresa y el 24 de julio del 2020 presentó información falsa sobre sus supuestos ingresos y así obtuvo los 150 mil dólares que le otorgó el gobierno de Carolina del Norte, a través de la ley Cares, apoyo que el gobierno dispuso para negocios que tuvieron pérdidas por la crisis económica.
«CLIFTON acordó específicamente usar los fondos del préstamo para Jazzy Jas LLC ‘únicamente como capital de trabajo para aliviar el daño económico causado por el desastre que empezó a ocurrir el 31 de enero de 2020′», se lee en el documento.
El 14 de agosto de ese año ella obtuvo el dinero por la crisis de covid, el cual pronto gastó en lujosas tiendas de ropa y accesorios.
Leer también: Estos son los requisitos que deben cumplir las empresas para reabrir tras emergencia por covid-19
(Imagen ilustrativa: Unsplash)
Cometió fraude
La mujer fue descubierta el pasado 17 de febrero, de manera que fue acusada por los cargos de fraude electrónico en relación con un beneficio por desastre y por fraude vinculado a los beneficios de emergencia.
Por estos dos delitos podría recibir 30 años cada uno, es decir un total de 60 años en prisión, pero eso no es todo pues además deberá pagar una multa de un millón 250 mil dólares (26 millones 121 mil 737 pesos), esto de acuerdo con un comunicado del Distrito Oeste de Carolina del Norte.
La joven compareció en una corte federal esta semana y fue liberada con una fianza de 25 mil dólares, según muestran los documentos judiciales.
“En un momento en que nuestra nación enfrenta con los efectos de la pandemia de coronavirus y las empresas luchan para hacer frente al impacto de covid-19, los estafadores aprovechan la oportunidad para robar programas federales de ayuda económica para llenar sus propios bolsillos”, escribió el fiscal federal Andrew Murray, en un comunicado enviado a CNN.
Recuerda que con nosotros puedes seguir informado en Google News.
________________________________________________________________
Foto de portada: Unsplash.
Podría interesarte:
Así puedes tramitar el microcrédito de 10 mil pesos en la CDMX
Nuevos liderazgos buscan combatir los efectos más serios de la COVID-19
Acostúmbrate al cristal acrílico: así volveremos a la ‘normalidad’ tras covid-19