El maltrato animal también pasa por acciones como la contaminación en las calles, en los mares, en las islas, en cualquier lugar. Las distintas especies en el mundo están expuestas a nuestro mal comportamiento y lo hemos repetido decenas de veces: no tirar las colillas de los cigarros porque los pajaritos las recogen y se intoxican, no tirar los popotes en los mares porque las tortugas podrían inhalarlos y morir asfixiadas, vamos… ¿Por qué nos cuesta tanto trabajo entender?
En esta ocasión, la historia tuvo un “final feliz” y lo entrecomillamos porque en realidad esto nunca debió suceder si nosotros como seres humanos fuéramos más limpios. Una osa, en Florida, deambuló durante un mes con una botella en la cabeza, un garrafón que cargó durante todo ese tiempo en que estaba en busca de ayuda.
Un mes con una botella de plástico en la cabeza…
Un mes, ¿te imaginas eso? Si nosotros con el cubrebocas por un par de horas ya sentimos que nos hace falta el aire, imagina ahora a esta osa, cuya cabeza pesa 250 libras, deambular durante todo ese tiempo con una botella de plástico en la cabeza, un garrafón que no dejaba que pudiera comer o beber agua.
Todo ocurrió cerca de la zona residencial de Golden Gate Estates, en Florida, en Estados Unidos. Fue la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Fauna de Florida la que informó que la osa fue rescatada. “¡Oso rescatado! Se informó que un oso adulto deambulaba con un recipiente de plástico en la cabeza”, postearon en sus redes sociales.
En el video que te mostraremos a continuación, podrás ver cómo el animal camina con la botella de plástico atorada en su cabeza y el momento en que estos integrantes de la FWC lo despojan de este garrafón.
Todo gracias a una cámara de seguridad
De acuerdo a los informes de esta Comisión para la Conservación de la Pesca y la Fauna, la osa estuvo 28 días con la cabeza atrapada dentro del envase desde que se dio el aviso, pero nadie logró localizarla de nuevo hasta pasadas tres semanas.
Fue la cámara de seguridad de una vivienda la que captó en sus inmediaciones a la osa y esto permitió que un grupo de expertos y la oficina del alguacil la encontrara y la liberara del objeto que apretaba su cabeza.
