“Me ofrecieron más de un millón de dólares. Lo rechacé”, fueron las palabras de la leyenda de rock inglesa, Rod Stewart a la petición que le fue propuesta para que fuera parte de los shows que se llevarán a cabo durante el Mundial de Qatar a celebrarse a partir del próximo 20 de noviembre. Su rechazo, por motivos éticos, se suma a las críticas de figuras públicas como Dua Lipa al duro régimen qatarí que vulnera constantemente los derechos humanos de mujeres, integrantes de la comunidad LGBT+ y trabajadores migrantes.
En una entrevista que concedió al diario The Sunday Times afirmó: “Me ofrecieron más de un millón de dólares hace 15 meses para tocar. Lo rechacé. No me parecía correcto ir”, confesó. “Y los iraníes también deberían dejar de suministrarles armas”, añadía. Stewart es conocido por su compromiso político y solidario, pues hace unos meses acogió en su casa a una familia de refugiados ucranios. Según contó al periódico británico The Mirror, se encargó en buscarles y costearles una vivienda, sustento y educación para los hijos de la familia.
Qatar prometió respetar todos los derechos humanos
Recordemos que al momento de concederle la sede del Mundial de futbol, una de las grandes incógnitas era cómo iban a manejar el tema de los derechos humanos que claramente no respetaban en su totalidad, por lo que una de las condiciones era garantizar a todos un trato digno, sin embargo, es bien sabido que en Qatar ser homosexual es ilegal y ha llegado a estar penado con la muerte pública. En la actualidad, se castiga con siete años de prisión. El exfutbolista Khalid Salman, embajador del Mundial de Qatar, dijo en la que tolerarán a los visitantes del colectivo LGTBI durante el evento, pero que estos “tendrán que adaptarse a las normas”.
En el país rige un sistema de tutela masculina, por el cual las mujeres dependen toda su vida de un tutor varón, sea este un padre, un hermano, abuelo o tío o, en caso de estar casadas, su esposo. Además, la construcción de las infraestructuras propias del Mundial se ha conseguido gracias a un ejército de inmigrantes poco cualificados que han trabajado en condiciones de semiesclavitud. Según un informe de Amnistía Internacional de 2021, más de 15.000 personas han perdido la vida en las obras. Una investigación del periódico británico The Guardian reducía la cifra a 6.500. Las autoridades qataríes no han confirmado ni desmentido tal afirmación.
Ante tal panorama, no es de sorprenderse que diversas celebridades rechacen actuar en un evento que al parecer no ha cumplido totalmente lo prometido en cuanto al respeto de los derechos humanos de todos, por lo que se mantiene la expectativa para saber quienes serán los encargados de realizar los shows durante el Mundial de Qatar, pues quienes han accedido a ser parte o imagen del mundial, han recibido duras críticas.
Ref. El País
