Sabemos que estás cansado de escuchar siempre las mismas canciones en todos los sitios de Internet. Tranquilo, no eres el único. Así como tú, nosotros también estamos hartos de no encontrar algo diferente en este mundo virtual. Si lo pensamos un poco, es extraño que siendo el Internet tan vasto, casi infinito, nos topemos una y otra vez con los mismos temas. Este fenómeno místico tiene una respuesta específica que muchos pasan desapercibida por su cotidianidad oculta.
Las plataformas de música en la nube suponen actualmente un 43% de los ingresos digitales de la industria discográfica mundial. Por primera vez en la historia, las ganancias virtuales superan la venta física de los materiales discográficos u otras vías tangibles. El modelo de música en streaming, impulsado por Spotify, ha supuesto un cambio tan disruptivo en la industria discográfica como lo fue en su momento la digitalización de la música. Las plataformas de música en streaming están desplazando a gran velocidad a los servicios de descarga de canciones que antes lideraba la compañía Apple.
El problema de escuchar música online es que está regulada. Sí, la idea de que el Internet era libre terminó hace mínimo una década. La información que circula por el mundo virtual se divide en dos: la que sirve para hacer negocios y la que es libre porque muchas veces sólo es informativa. La música que escuchas en plataformas virtuales —esto incluye YouTube— tiene que cumplir ciertas reglas de derechos de autor y licencias de comercio.
Alguien se puede preguntar “¿pero qué pasa con las bandas que están iniciando y no tienen algún contrato con una disquera?”. Si estos grupos quisieran que sus canciones aparecieran dentro de Spotify, por ejemplo, tendrían que apegarse al estricto reglamento del mercado. Si buscan alternativas libres, probablemente carguen su material a sitios underground, que debido a su naturaleza oculta, pasan casi inadvertidos.
Esta es una de las repuestas del porqué siempre se escuchan las mismas bandas en la red, porque restringir el mercado debido a licencias limita la distribución de la música de todo el mundo. Muchos se excusarán diciendo que entrar en esta lógica beneficia al autor intelectual, pero lamentamos informarles que el porcentaje de ganancia de las bandas que suben su música a plataformas como Apple Music y Spotify, es m{inimo, digamos un 15 o 20 por ciento del total que recaudó.
Sí, el arte tampoco se escapa de la sucia lógica del comercio. Por eso, te traemos algunas bandas que están tratando con todas sus fuerzas cambiar los modelos establecidos arbitrariamente para dar a conocer la música.
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Delta Venus
La singular psicodelia por la que se mueve Delta Venus les ha permitido llegar a oídos de los músicos norteamericanos de MGMT, quienes produjeron su disco debut homónimo, del cual se desprende este magnífico tema: “Puñal”.
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Surfistas del Sistema
Esta banda sobresale por la corta edad de sus integrantes y la intensidad de sus canciones, demostrando el nuevo panorama argentino de la música. Su álbum debut homónimo muestra enérgicas canciones como las de ‘Yo soy’ y ‘Ella es normal’, que por supuesto, tienes que escuchar para comprender el nuevo movimiento sonoro.
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Paris Paris Musique
El grupo, originario de Córdoba, rescata el espíritu del sonido alternativo y un poco del garage. Su segundo disco contó con la producción de Gordon Raphael, quien trabajo anteriormente con The Strokes. Tienes que escuchar ‘Love is a Highway’ y ‘Llévame’.
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Un Planeta
Sus canciones están envueltas en una oscuridad planetaria que se dispersan entre acordes eficientes y una voz despreocupada. Un Planeta llega desde la ciudad de La Plata para presentar y jugar con el género del dream pop y el noise.
https://www.youtube.com/watch?v=MhZd1AcaRvo
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Los Nuevos Monstruos
Las composiciones de Los Nuevos Monstruos se caracterizan por retomar elementos de la psicodelia británica de los 60 y el rock clásico argentino. Sus guitarras mantienen un ritmo sólido que forman melodías alegres que se funden con la suave voz de Federico Arce.
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Barco
Su pop electrónico deja en claro que la intención de Barco es hacer bailar a su público. Su música es un camino experimental que se puede escuchar en ‘Sobre la superficie’ y ‘Órbita’.
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Hippidons
Con un ritmo electrónico que juega entre el synth pop y el indie rock, el grupo Hippidons sorprendió con su primer EP que tiene un arte psicodélico que engancha desde el primer play.
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Detonantes
Aman las guitarras ruidosas, que claramente son una influencia del rock clásico e indie rock. Sus mejores canciones son ‘Afuera no hay nada’, ‘Seguir’ y ‘Tirando poderes’.
https://www.youtube.com/watch?v=nNf5bRJmyFQ
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The Songlines
Recordando al rock juvenil de Splashh o Swim Deep, The Songlines es una de las pocas bandas jóvenes que pueden expresar de manera contundente una propuesta de punk rock combinado con indie rock.
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Zero Kill
Zero Kill, el proyecto musical de Benito Cerati, coquetea con un género experimental que raya en el trip hop y la música ambient. Como toda banda joven argentina, también usa un poco de psicodelia para darle un giro dramático a su música.
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Rayos Láser
Nominados a los premios MTV Europe Music Awards en 2013, estos jóvenes han abierto conciertos de la banda Keane. Rayos Láser se ha consagrado como una de las bandas revelación del pop argentino.
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Kimonos de la Geisha
Con un sonido influenciado por el indie rock de principios del 2000, la banda tiene dos EPs en el mercado con canciones que demuestran su desatada juventud.
https://www.youtube.com/watch?v=0HV4wHNcUa4
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La Armada Cósmica
Esta joven banda de garage y rock and roll presenta su ópera prima, llamada “Budapest”, que muestra que las guitarras distorsionadas con ritmos sólidos nunca pasarán de moda. Últimamente han experimentado con sonidos más electrónicos dando muy buenos resultados.
https://www.youtube.com/watch?v=JsEPSkf3VTk
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Estas son algunas propuestas del nuevo rock argentino, aunque también hay grupos más viejos que debes conocer y son perfectos para salir de la rutina.
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