Todos amamos la música, pero pocos amamos la buena música. Todo depende del entrenamiento que le demos a nuestros oídos. Podemos escuchar sonidos cualquiera y alimentar a nuestros sentidos con nimiedades. Si escogemos ese camino nunca saldremos de los simples éxitos de la radio. En cambio si elegimos el camino difícil, tendremos una ardua tarea de buscar tanto el pasado como el presente oculto. Nos llevará tiempo, pero después de oír cientos de canciones exquisitas nuestro gusto será el de un experto.
En Cultura Colectiva tenemos cientos de propuestas que pueden enriquecer tu biblioteca y que puedes usar para entrenar al oído terco que suele cerrarse a lo convencional. Puedes escuchar buen rock, jazz, funk y música electrónica.
De entre toda esta oferta debes buscar lo que más te acomode, porque sólo tú sabes cuáles son tus gustos y hacia dónde los quieres dirigir. Si aún no te convences de abrir tus fronteras musicales, debes saber que un nuevo estudio reveló que cuando escuchamos canciones por primera vez se activa una zona del cerebro conocida como nucleus accumbens, asociada al placer y el deseo. La música, al libera grandes cantidades de dopamina, provoca placeres tan grandes como los de un orgasmo
Ahora sí, empieza a educar tus oídos con los artistas que los expertos de la música recomiendan.
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The Clash
The Clash, considerada como una banda de culto por integrar estilos tan diversos al rock y al punk. El disco “London Calling” puede escucharse ritmos de ska, pop, soul, rockabilly y reggae. Al unir todo y hacerlo tan bien se hacen acreedores a una fama mundial. Todos conocen los hits de ‘Rock the Casbah’ o ‘Should I Stay or Should I Go’. Esas canciones son buenas, pero las personas que saben de música conocen su discografía saben que hay cosas mejores.
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Portishead
Las personas que escuchan mucha música y llegan al punto más maduro de su gusto, prefieren las estructuras complejas. Portishead reúne todos los elementos sonoros para encantar a los oídos más exigentes. Ellos fueron los pioneros del estilo trip hop y desde entonces se dedicaron a componer música elegante y sensible que enerva la sangre al ritmo de la voz de Beth Gibbons.
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The Velvet Underground
Los conocedores y amantes de la historia de la música dicen que The Velvet Underground fue la primer banda que llevó el rock a la verdadera experimentación. Durante la década de los 60, los músicos estaban encasillados en el género psicodélico y fue hasta que llegó la banda de Lou Reed que se demostró la posibilidad de llevar la música a lugares -en apariencia imposibles-. En el disco “White Light / White Heat” (1968) se escuchan los primeros pasos del proto-punk, rock experimental e indie rock.
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Moby
A pesar de ser un compositor de música electrónica, Moby se encuentra en el reproductor de los amantes de la música que tienen como género favorita al rock. En los 90, el disco “Play” se volvió una obra de culto que escuchaban las personas más refinadas. Desde ese momento el mundo lo amó, reafirmando su cariño durante sus presentaciones cuando hacía covers de sus canciones favoritas con su tímida guitarra.
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Led Zeppelin
Durante sus 12 años de carrera, Led Zeppelin tuvo momentos en que voló hasta la estratosfera y otros que camino junto a los mortales. Tienen canciones muy clásicas y quizá un poco ensuciadas por los gustos básicos, pero quienes se atreven ir más allá de lo común encuentran un fuente inagotable de creatividad. Sólo los expertos en la música conocen ese lado y lo idolatran ahora y durante el resto de sus días.
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The Cure
Es otra banda vieja, pero de esas que nunca se olvidarán. Roberth Smith puede parecer una señora gorda y vieja pero durante mucho tiempo se dedicó a proponer buena música. Con una guitarra llenó nuestra biblioteca de éxitos que a la fecha seguimos cantando. Por este cúmulo de razones, cuando un melómano enlista sus artistas favoritos nunca falta The Cure.
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Nine Inch Nails
Siguiendo con los artistas complejos. Nine Inch Nails es un grupo de rock pesado. Su música es tétrica y agresiva pero tiene un encanto que sólo las personas con un oído entrenado logran captar. El vocalista, Trent Reznor, se volvió una estrella en los 90 y comenzó a aparecer con David Bowie o Lou Reed. Si ellos aceptaron y veneraron su talento es porque hay algo magnífico oculto en sus sombras.
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Nick Cave & The Bad Seeds
La palabra que describe a Nick Cave y su banda es refinado. Ellos no tocan rock, ni blues o jazz, sino su propio estilo dramático que se ha ido transformando con los años. Es probable que por su tendencia a sonidos melancólicos la gente no suela escuchar su música, pero el público que quiere algo superior a lo común encontrarán un prodigioso artista al que se le puede rendir culto.
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Beck
Empezó siendo el chico bobo de MTV en los 90. Con su éxito ‘Looser’ se ganó el corazón de los jóvenes incomprendidos del mundo. Con el paso de los años entendió que debía evolucionar de la mano de su público. Así fue como emprendió una carrera de innovación profesional y personal. Nunca perdió su toque irónico aunque últimamente se le escucha con un estilo más sobrio e introspectivo, lo cual se agradece porque las personas que saben de música ya han pasado por la época rebelde y necesitan algo más que sólo ruido.
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Arcade Fire
Fue sorprendente lo rápido que creció Arcade Fire. Inició con un disco tan grande como el de cualquier artista consagrado y desde ahí empezó a caminar con paso firme. Desde “Funeral”, la banda canadiense se coló en los gustos de las personas más exquisitas y a la fecha sigue ocupando un lugar especial en las bibliotecas de los melómanos. Su estructura de pequeña orquesta se popularizó y en poco tiempo todos querían ser como ellos. Muchas bandas los imitan pero sólo ellos tienen la fórmula para hacer algo magnífico y bello.
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Es probable que ya conozcas a varias de estas bandas pues su grandeza las coloca en el gusto popular de las personas. La diferencia es que ahora, como tú también quieres ser un experto, deberás escuchar a detalle su discografía. En tu búsqueda te darás cuenta que las joyas no son las que todos conocen sino las que te mueven de una manera particular el corazón.
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