Las plantas de café son originarias de la antigua Etiopia pero es
fácil confundirse con su verdadero origen, ya que antiguas leyendas sobre el cultivo del grano y la costumbre de tomar café provienen de Arabia. Uno de los más antiguos escritos que hace referencia al café es llamado “The Success of Coffee”, escrito por un hombre originario de la Mecca llamado Abu-Bek a principios del siglo XV.
La más leyenda popularmente aceptada acerca del descubrimiento del café y la bebida es la que hace referencia a un pastor llamado Kaldi. Esta leyenda cuenta que Kaldi se dio cuenta del extraño comportamiento de sus cabras después de que habían comido la fruta y las hojas de cierto arbusto. Las cabras estaban saltando alrededor muy excitadas y llenas de energía. El arbusto del que Kaldi pensó que sus cabras habían comido las frutas tenía como frutas parecidas a las cerezas. Entonces Kaldi decidió probar las hojas del arbusto y un rato después se sintió lleno de energía.
Kaldi después llevó algunos frutos y ramas de ese arbusto a un monasterio. Allí le contó al Abad la historia de las cabras y de como se había sentido después de haber comido las hojas. El Abad decidió cocinar las ramas y las cerezas; el resultado fue una bebida muy amarga que tiró de inmediato al fuego. Cuando las cerezas cayeron en las brazas empezaron a hervir, las arvejas verdes que tenían en su interior produjeron un delicioso aroma que hicieron que el Abad pensara en hacer una bebida basada en el café tostado, y es así como la bebida del café nació.
Hoy, algunos puristas del café tal parecen sucesores directos de Kaldi; aquellos que están en contra de grandes cadenas cafeteras como Starbucks tachando al emporio de una plaga banal del capitalismo feroz, y al parecer, durante los años 80 los jóvenes dejaron de beber café por completo, pues “la soda” era más rica y no los hacía ver y sentir como un anciano.
Fue por eso que en 1984, la Asociación Nacional del Café lanzó una campaña llamada “The Coffee Achievers” tratando de vender la idea de beber café como una costumbre joven y moderna aunque no es del todo claro quién era un portavoz oficial de la campaña. Figuras como las del mariscal de campo de la NFL, Ken Anderson, Jane Curtain o David Bowie fueron usadas para promover el café sin su completo conocimiento.
Después de todo, la campaña no tuvo el éxito esperado, pues aunque muchos no quieran aceptarlo, Starbucks y la exportación de la cultura grunge de Seattle hizo más por el consumo joven que “The Coffee Achievers”, incluso la deliciosa bebida tardó unos cuantos años más para hipnotizar a la generación MTV; esa misma que hoy forma parte del ejército oficinista que ya no concibe una mañana sin tu taza de café.