El lunes se hizo viral un video en el que el senador regiomontano Samuel García reclama a su esposa que “enseña de más” en un live que hicieron por Instagram con la frase “Me casé contigo pa’ mí”, no para que andes enseñando”. Seguro lo viste.
Luego de que las redes se inundaran de reclamos contra el representante del partido Movimiento Ciudadano, él se disculpó en Twitter diciendo que “las bromas machistas son una mala costumbre” y que nadie le enseñó a ser feminista.
Pero no, hay que decirlo muy claro cuantas veces sea necesario: ninguna señal de violencia de género, por mínima que sea, es aceptable. Lo que pasa es que con frecuencia el machismo se disfraza de bromitas, costumbres o hasta de falsa protección, como en el caso de los celos.
A lo mejor te suenan frases como “confío en ti, pero en ellos no”, “¿por qué no me contestabas” o “mejor no tengas amigos para pasar más tiempo juntos”. O conductas como pedir la contraseña de tu cel, que no te dejen maquillarte como quieras o hasta acusarte de andar coqueteando todo el tiempo.
En el Consejo Ciudadano desarrollamos el Celómetro, que contiene una escala de actitudes y comentarios que pueden ayudar a identificar el nivel de riesgo que implica su relación. Otro dato relevante para hoy, que es Día Internacional de la Juventud, es que la mayoría de las llamadas y whats que recibimos por parte de jóvenes en la Línea de Seguridad y el Chat de Confianza, 55 5533 5533, son para pedir apoyo emocional.
Algunos lo solicitan por ansiedad ante Covid-19, otros por depresión e incluso pensamientos suicidas, pero muchos también requieren la contención porque viven un noviazgo violento y les da pena hablarlo con sus amigos o familiares. Si es tu caso o conoces a alguien que se encuentra en una situación así, recuérdale que no está sola ni solo. Nuestro servicio es gratuito, funciona 24/7 y es atendido por psicólogas y psicólogos, abogadas y abogados que escuchan con empatía.
Por si quedara duda, vale la pena precisar que también los hombres padecemos el machismo. Así que nuestra atención está abierta para cualquiera que sufra en su relación y también para cualquier tipo de relación, pues la violencia se registra igualmente en las parejas de la población LGBT+.
El machismo es un problema en cuya solución participamos todos, poniendo el ejemplo. O sea, sí se trata de que “andemos enseñando” pero sobre nuevas masculinidades, respeto y libertad.
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*Las columnas de opinión de Cultura Colectiva reflejan sólo el punto de vista del autor.
