El 29 de mayo, dos oficiales de seguridad fueron emboscados por disparos de ametralladoras mientras un grupo de manifestantes marchaba pacíficamente para protestar por el asesinato de George Floyd. El presunto culpable resultó ser un hombre llamado Steven Carrillo. Él y su cómplice formaban parte del movimiento “boogaloo”.
Las autoridades dicen que cuando fueron a detener a Carrillo en su residencia, este los atacó matando a uno de los policías. Adicionalmente, los investigadores encontraron parches con imágenes características del grupo de boogaloo en un vehículo utilizado por Carrillo, así como otros garabateados con su propia sangre y con varios lemas del movimiento (Beran 2020).
Ese ataque combinado con otros y combinado con la presencia de hombres del grupo en cada vez más eventos han despertado la atención del mundo. De hecho, hace un par de semanas escribí sobre el tema ya que, para muchos, estos hombres armados y vestidos con chalecos antibalas y camisas hawaianas son un ejemplo de un nuevo tipo de terrorismo (si quieres leer más, da click en este link).
El movimiento nació y creció en el tablero de mensajes de 4chan, un sitio de internet que básicamente es un foro en donde se pueden discutir temas de manera anónima (que de hecho fue la cuna de los memes).
Hasta el 2019, los bongaloo constituían una mezcla de grupos en línea donde los usuarios compartían memes políticos. En los últimos seis meses, fue cuando todo esto comenzó a manifestarse en la vida real, ya que los usuarios de los grupos comenzaron a aparecer en las protestas con lo que se convirtió en su uniforme característico (Beran 2020). Según los expertos, lo que sucedió fue que a medida que los disturbios en todo el país se intensificaron al comienzo del verano, muchos partidarios del boogaloo interpretaron esto como una señal para realizar la fantasía central del grupo: la revuelta armada contra el gobierno de Estados Unidos.
Cosas importantes que hay que tomar en cuenta:
El movimiento boogaloo es al menos el tercer ejemplo de una masa de memes que escapa de 4chan para convertirse en un movimiento político radical de la vida real, siendo el primero Anonymus (sí , de ahí salió Anonymus), que surgió en 2008; y el segundo un grupo fascista de extrema derecha llamado alt-right, que se formó en 2015 (Beran 2020).
Al igual que otros movimientos extremistas, los bongaloo son producto de una generación infeliz que compara su vida con la de décadas anteriores. Con una mezcla de ignorancia y simplicidad, ellos ven y proyectan su descontento a través de los memes.
¿Qué tan grave es la amenaza?
Una de las dificultades para medir la importancia de la amenaza del boogaloo es su naturaleza (que como menciono en otro texto también puede ser su punto débil). Sin embargo, la amenaza de movilización masiva permanece baja ya que solo una pequeña minoría ha mostrado una inclinación a llevar el boogaloo más allá de las pantallas de sus computadoras. No obstante, como lo demostraron los ataques recientes, existe claramente un riesgo de individuos radicalizados o grupos pequeños.
¿Qué se puede hacer?
Los memes como el boogaloo parecen, a primera vista, una fuente poco probable de riesgos de seguridad a gran escala. Pero es precisamente esta falta de familiaridad la que debe ser motivo de profunda preocupación. Como dije anteriormente, el riesgo permanece bajo. No obstante, ¿cuántos movimientos diferentes se encontrarán en proceso de creación o de crecimiento detrás de memes? ¿cuántas generaciones infelices tienen en su interior potenciales agresores?
Evidentemente, es imposible que todos los individuos estén conformes con su situación o su gobierno. No obstante, algo más está fallando ya que el odio se sigue perpetuando y una cosa es la inconformidad y la otra el odio acumulado y alimentado. En mi opinión, la incógnita debería de ser esa.
Seguiremos discutiendo sobre el tema.
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