A finales del 2019, en la ciudad de Wuhan, en China, se identificó el brote de una nueva cepa de coronavirus, una familia muy extensa de virus que causan una variedad de enfermedades como los resfriados comunes hasta las neumonías.
Sin embargo, este nuevo virus, que fue nombrado oficialmente como COVID-19, probó ser un reto para las autoridades sanitarias de China y el resto del mundo (como la Organización Mundial de la Salud).
Hasta la actualidad, el coronavirus se ha esparcido a través del mundo y suman aproximadamente 55 países en los que se han confirmado casos de coronavirus; del mismo modo los científicos están en la búsqueda de una vacuna y un tratamiento eficaz que detenga lo que la OMS predijo que podría ser la siguiente epidemia en la historia humana.
De momento, una de las recomendaciones más importantes de la OMS ha sido mantener una higiene estricta:
- Lavarse las manos y desinfectarlas,
- Evitar tocarse ojos, nariz y boca
- El uso de mascaras N95, entre otras sugerencias especializadas.