La tradición milenaria del budismo es mucho más que una religión, se trata de una filosofía de vida que tiene como fin el encuentro contigo mismo y el entendimiento de las verdaderas causas del sufrimiento humano, el aferramiento y los deseos no realizados a través de la meditación, el contacto con la naturaleza y la relajación. El atlas de las emociones es un proyecto que se inspiró en una serie de conversaciones entre el Dalai Lama y el famoso psicólogo Paul Ekman, acerca del origen de las emociones humanas.
¿Qué es un mapa emocional?
Uniendo la filosofía milenaria del budismo con los avances científicos en la psicología y la psicopatología, Ekman desarrolló un sofisticado “mapa emocional” a través del cual se pueden entender las emociones y desarrollar las habilidades para tener el poder de elegir qué emociones pueden afectarnos realmente y cuáles deben ser repelidas por nosotros mismos. Se trata de habilidades que ignoramos por naturaleza, pero que es posible aprender para llevar una vida más sana y sobre todo, entender que todo estado de sufrimiento es opcional y que el equilibrio es el camino a la felicidad.
En el proyecto, cada emoción está representada por un continente, a la vez caracterizado por un color. Según sus creadores, la tristeza, el disgusto, el miedo, la ira y la felicidad son las grandes emociones que controlan cada impulso humano. Cada emoción es un proceso y como tal, tiene pequeños estados distintos que aumentan en intensidad e influencia en nuestra conciencia.
¿Cómo funciona para mejorar el entendimiento humano de las emociones?
En el caso del continente felicidad, los estados que van de menor a mayor inician con un placer sensorial, seguido por el disfrute, el sentirse maravillado, la excitación y sigue en aumento hasta llegar al éxtasis. El sitio contiene una explicación certera de cada uno de los estados y el rango de su intensidad en una persona.
¿Cuáles son las acciones que provocan esos estados? La explicación está incluida en la sección de “desencadenadores” de las emociones. En el caso del mismo continente, las acciones que provocan cada uno de los estados de felicidad son parte de un proceso que involucra actividades como la interacción social, ayudar a otros, experimentar la naturaleza sensorialmente, visitar sitios asociados a recuerdos felices, probar un pastel de chocolate o pasar tiempo de calidad con tu familia.
El proyecto está respaldado por un consenso científico entre psicólogos que participaron en un estudio elaborado en 2015, titulado “Perspectives on Psychological Science”. En la investigación, los especialistas determinaron que existe evidencia suficientemente reveladora a nivel mundial, como para concentrar el grueso de las emociones en los cinco continentes del mapa emocional. El estudio está respaldado por una enorme encuesta relizada en las principales universidades del mundo para romper con la noción de que las emociones están determinadas por el entorno social. Si bien éstas influyen de forma importante en las manifestaciones de la felicidad, el enojo o la tristeza, las personas de todo el mundo, sin importar su orientación religiosa, sexual o política, describen de forma similar cada estado de ánimo.
La metodología completa del estudio, además del mapa de las emociones inspirado en la ciencia y los principios budistas del Dalai Lama, están disponibles en el sitio oficial de Paul Ekman. La combinación entre conocimiento científico y siglos de saberes ancestrales crea una alternativa atractiva para tratar de mejorar la calidad de vida, además de comprender cada estado negativo del ser humano como un momento pasajero, con miras a alcanzar un equilibrio que potencie la felicidad en tu vida.
Para introducirte al budismo no necesitas más que tratar de liberar tu mente y abrirte a nuevas formas de pensamiento. Empieza por seguir estas 15 lecciones de Buda para crecer espiritualmente y vivir mejor. Si pasas por un momento difícil, la filosofía budista puede ser tu mejor aliada para superarlo. Toma nota de las instrucciones para superar la pérdida según el budismo y date cuenta de que el sufrimiento es opcional y es tu elección si te afecta o no.
