Mira este video y ve lo que sucede con el trago de esa mujer:
Enervante, ¿cierto?
Esto es algo que puede sucederle a cualquier mujer que esté en un festival, en un bar o hasta en una cita con alguien que acaba de conocer. Un individuo puede poner una droga en su bebida para engañar sus sentidos y abusar de ella en más de una forma.
El video que se hizo viral en el sitio NewzHub ha generado controversia y aunque su veracidad ha sido puesta en duda, sirvió para recordarnos del peligro que puede correr una persona cuando sólo quiere divertirse. Parece que cada vez es más común que alguien drogue a otra persona para aprovecharse de ella y existen diferentes métodos para lograrlo. Los siguientes son algunos de ellos y nos recordarán que siempre debemos cuidarnos, pues no sabemos qué tipo de amenazas puede haber a nuestro alrededor.
Ofreciéndote comida
Es un clásico escuchar historias sobre personas que comieron brownies de marihuana sin saberlo, pensando en que eran normales. Sin embargo, también puede suceder que alguien le de comida con alguna droga a una persona para aprovecharse de ella. Claro, es mucho más complejo que hacerlo con una bebida, pero es posible. El GHB —una de las drogas más populares que usan los violadores— tiene distintas formas entre las que se encuentra un polvo blanco que no necesita disolverse para provocar un efecto. Si sientes que la comida está demasiado salada, posiblemente tenga algo. De igual forma, si tiene un sabor extraño también podría contener ketamina, otra sustancia que se usa en estas situaciones.
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Soplándote
Existe una droga apodada burundanga que se ha popularizado en Colombia. La droga es famosa porque no parece tener un efecto inmediato. La persona actúa normal, como si nada le sucediera, sin embargo no está pensando claramente así que podría llevar a un ladrón a su casa, darle todo su dinero o hasta tener sexo con éste sin darse cuenta hasta el día siguiente. La droga puede usarse en bebidas o comida, pero un método sólo requiere soplarlo hacia la nariz de la víctima y eso es suficiente para tenerlo controlado durante el resto del día.
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Con una inyección
Este es un método poco popular dado que es complicado, peligroso y la víctima puede darse cuenta con relativa facilidad, sin embargo, ha habido distintos casos registrados. El perpetrador sólo necesita un poco de su droga elegida en la punta de una aguja y picar a alguien con ella para lograr su cometido. Esto puede ser sencillo en alguien que está bajo el efecto del alcohol ya que tal vez no sienta o identifique que se trató de un pinchazo de una aguja y piense que fue otra cosa. Si sientes algo similar, lo mejor es acercarte de inmediato con tus amigos y pedir ayuda.
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Con una droga falsa
Este es el método más peligroso para quienes están acostumbrados a aceptar drogas de desconocidos. En algún punto alguien podría ofrecernos éxtasis o alguna droga que sí nos guste —y que elegimos consumir—, pero no sabemos a ciencia cierta si nos dará otra droga que nos deje inconscientes e indefensos. Es un riesgo latente y demuestra que no deberíamos tener tanta confianza en personas que no conocemos, ya que en cualquier momento podríamos terminar en el piso o peor.
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Existe un término llamado date rape en el que un hombre sale en una cita con una mujer y la droga para asegurar que tendrá sexo con ella. Los casos en Estados Unidos cada vez incrementan y pocos suelen ser penalizados ya que se culpa a las mujeres por estar consumiendo alcohol. Eso genera más enojo en contra de la sociedad y es que, ¿cómo podremos sentirnos seguros si no sólo tenemos que lidiar con violadores en potencia, sino también con el machismo que persiste? Es imposible.
