El ruido inunda todos los rincones de tu casa y todos tus familiares huyen despavoridos hacia las habitaciones lejanas con la esperanza de que el ronquido no llegue a sus oídos esta noche y así puedan dormir en paz. Y es que algunas personas no logran acostumbrarse a ese crudo sonido y se convierte en una pesadilla que les puede provocar problemas de sueño. Pero el ronquido no sólo afecta a quienes te rodean. Su estruendo podría ser señal de que algo no está bien con tu salud y que quizá deberías ir al médico.
De acuerdo con el diario de la Escuela de Medicina de Harvard y distintos expertos, el ronquido muestra señales de que alguien puede tener problemas del corazón o de que se encuentra en una etapa temprana del Alzheimer.
Apnea del sueño
En un reporte realizado por Clarín, en conjunto con el médico Ferrán Barbé, jefe de grupo del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), el experto aseguró que los ronquidos son comunes entre la población adulta y que sólo debería preocupar cuando su patrón es entrecortado. Es decir, si alguien está roncando y deja de respirar por ciertos periodos, puede ser un síntoma de que sufre apnea del sueño, lo cual debería ser revisado por un profesional de la salud.
La apnea del sueño es un desorden en el que existen pausas en la respiración o alteraciones en el patrón, lo cual viene acompañado de fuertes ronquidos (aquellos que impiden dormir a las demás personas). Esto provoca que las personas no descansen apropiadamente y que se sientan cansados durante el día. Existen tres tipos de apnea, la obstructiva, la central y una mezcla de ambas.
Sin importar cuál de los tres tipos sea, la apnea de sueño está vinculada con derrames cerebrales, ataques, paros cardiacos, enfermedades cardiovasculares, paros respiratorios o hasta daño cerebral. Esto es porque la apnea provoca que se reduzca la saturación de oxígeno en la sangre, lo cual puede afectar gravemente distintos órganos del cuerpo, especialmente el cerebro. De igual forma, se ha encontrado que un fuerte ronquido podría hacer que las arterias carótidas del corazón se hagan más gruesas, lo cual incrementa el riesgo de un derrame o de arteriosclerosis, cosas que pueden afectar gravemente al órgano.
Asimismo, se ha comprobado que la apnea del sueño está vinculada con el riesgo de sufrir diabetes y obesidad. Si un familiar o compañero nos dice que nuestro ronquido es irregular, es necesario visitar a un experto que haga un análisis de sueño, ofrezca su opinión profesional y comience un tratamiento para ayudar a prevenir esos problemas. De igual forma, el hecho de que no exista un patrón de sueño impide el descanso y que la memoria funcione de manera óptima, lo cual puede provocar problemas en la vida diaria.
Por otra parte, distintos estudios, como el de la Universidad de Harvard, han vinculado la apnea del sueño con el cáncer (se cree que aparece al inicio de la enfermedad) y hasta con el Alzheimer (aquellos que la sufren empeoran más rápido), así que se recomienda una revisión exhaustiva de todo el sistema para saber qué es lo que está mal.
Si crees que tienes un problema de sueño, consulta a tu médico. Los ronquidos pueden ser normales, pero si son demasiado fuertes y entrecortados es mejor conocer la opinión de un experto. Se recomienda pedir más de una opinión, ya que los médicos suelen pasar por alto distintas cosas o confundir los síntomas. Recuerda que cualquier señal podría ser un eco de algo más fuerte así que cuídate y no normalices esos ronquidos molestos.
Si tienes dudas sobre tu salud, puedes consultar a un médico en línea en la plataforma Docademic, misma que ofrece asistencia médica gratuita las 24 horas los 7 días de la semana. Descarga la app para Android o IOS.