Agarrar la mochila y guardar sólo lo que el peso del cuerpo alcance a soportar. Andaremos muchos días con nuestra mochila al hombro pero, qué importa si el peso es compartido y para eso nadie mejor que tus amigos.
Viajar de mochilero tiene la enorme ventaja que nunca conocerán quienes sólo practican el turismo de lujo: podrán ver partes del mundo y vivir situaciones que de un otro modo nunca verían. Viajar por América Latina tiene la apasionante ventaja de que será, no sólo un encuentro con lugares impresionantes y situaciones extremas, sino que conocerán sus rincones más íntimos de la mano de sus pobladores.
Caminar la geografía latinoamericana, siendo latinoamericano o extranjero, es una osada aventura de los espíritus viajeros, de quienes quieren ver con sus propios ojos otros lugares, con su gente, su cultura, sus sabores, colores y la pasión de espacios con historia y tradición. Recorrer Latinoamérica de la mano de quienes habitan esos espacios, cobijados por la calidez de los latinoamericanos nunca nos decepcionará; siempre habrá alguien que tienda una mano solidaria en el camino y un alimento caliente que compartir al lado de un fogón.
Atravesar la geografía: desiertos, bahías, poblados, montañas, como el cóndor o el jaguar, que se lanzan a conquistar un territorio, con ese espíritu aguerrido que los llevará lejos. Y en esa aventura, tener compañía de aquellos en quienes confías para salir al ruedo es, como mochilero, la mejor garantía que pueden tener.
Alista la mochila y comienza la aventura en la que compartirán pies cansados de tanto caminar…
Los puntos que esta ruta mochilera sugiere son:
Chiapas, México
Una de las rutas preferidas es el sureste mexicano, no sólo por su clima tropical, sino por la riqueza cultural de los pueblos de la zona maya. Si llegan por avión al aeropuerto de Tuxtla Gutiérrez, zona central de Chiapas, pueden aprovechar para conocer una ciudad colonial que queda a 15 km. Chiapa de Corzo y de ahí visitar el Parque Nacional del Cañón de Sumidero, donde puedes pasear por el río en lancha.
La ruta continúa hacia San Cristóbal de las Casas, pueblo que no pueden dejar de conocer. Podrán comprar artesanías, conocer a otros turistas y seguro encontrarán muchos hostales pequeños dónde quedarse. De ahí pueden partir hacia Palenque, imponente sitio arqueológico enclavado en la selva donde pueden disfrutar hasta tarde y hospedarse en el Panchán, un paraíso en medio de la selva con cabañas, comida tradicional y eventos culturales. A su regreso podrán conocer las Cascadas de Agua Azul, adentrarse más en la selva hasta llegar a Bonampak, sitio arqueológico famoso por los frescos. Si tienen más tiempo, pueden visitar las Lagunas de Montebello.
Antigua y Tikal, Guatemala
También en la zona maya, pueden comenzar un recorrido por Centroamérica en Guatemala. Pueden llegar desde la frontera con México hacia Ciudad Hidalgo-Tecun Umán o la frontera de Comitán y Huehuetenango, por ésta última pasa la Ruta Panamericana. Al llegar a Antigua recorran las calles de esta bellísima ciudad colonial y hagan base para conocer los alrededores y volcanes como el Pacaya.
En Chichicastenango podrán conocer unos de los mercados de artesanía más grandes del mundo, un arrebatador paisaje de colores que les encantará. El lago Atitlán es un lugar obligado, pueden partir de Antigua a Pananchel, la ciudad más cercana y de ahí dirigirse hacia algún pueblito cercano como San Marcos la Laguna. Tikal, al norte del país, se puede visitar llegando por la ciudad de Flores.
Montezuma en Costa Rica
Para los amantes de la playa, el viaje por la península de Nicoya será el clima perfecto para pasar unos días en playas de finas arenas, acantilados, bahía, ríos y cascadas. Montezuma es una famosa playa de ambiente relajado, en el pueblito será barato hospedarse y tener compañía de más extranjeros que llegan al lugar. Pueden visitar también el Parque Nacional de Cabo Blanco y Playa Grande. Podrán conocer proyectos de eco-aldeas, turismo alternativo, pequeños mercados de producción artesanal y quizá, si el tiempo les sobra, trasladarse a la zona central del país, para visitar el Parque Nacional Volcán Poás, el parque más antiguo del país.
Atacama, Chile
Se puede llegar desde Calama a San Pedro de Atacama, donde podrán encontrar pequeños hostales para hospedarse. Atacama, en el medio del desierto, es una ruta de aventura que disfrutarás con tus amigos. Visita el Salar de Atacama, el Valle de la Luna, el Valle de la Muerte, el Valle del Arcoiris y las ruinas de Pukara de Quitor, estas últimas son parte de una antigua fortaleza indígena que ha sido declarada Monumento Nacional. En el desierto pueden hacer sandboard.
Patagonia, Argentina
En la zona sur de Argentina, pueden recorrer los glaciares de El Calafate y El Chaltén, perfecto para realizar trekking. De ahí pueden visitar Punta Arenas hacia Chile, también Puerto Natales y Torres del Paine. De vuelta en Argentina visiten Ushuaia; famosa ciudad y capital de Tierra del Fuego, además de ser la ciudad más austral del mundo. Visiten el Parque Nacional Tierra del Fuego y si lo hacen en invierno, tomen un paseo en trineo; también podrán esquiar y hacer paseos en snowcats.
El Salar de Bolivia
El salar de Uyuni es el más grande del mundo; en el pueblo de Uyuni se encuentra el cementerio de trenes del ferrocarril, la Isla pescado o Isla Cuijiri es un lugar perfecto para tomar fotografías. De ahí pueden partir para Pulacayo y conocer el centro de extracción de plata más importante del país, también pueden conocer la Reserva Nacional Eduardo Avaroa, que alberga extraordinarias lagunas de colores como la laguna Colorada y la laguna Verde, con diversidad de flora y fauna como flamencos.
Machu Picchu y Cusco, Perú
Para llegar a Machu Picchu, ciudad inca de imponente belleza, pueden hacerlo desde tren llegando por la ciudad de Cusco o por Ollantaytambo. Para la ruta de Cusco, si quieren disfrutar del paisaje de una manera más económica recorran por Santa María, Santa Teresa y Aguas Calientes. Si lo deciden, los alrededores de Cusco, como Arequipa (la ciudad blanca), Mollendo, Camana, y Nazca. Si llevan suficiente tiempo y recursos, pueden cruzar hacia Chile y visitar en Arica, desierto de Atacama y la capital, Santiago.
Cartagena, Colombia
En Cartagena de Indias podrán explorar el interior de la Ciudad Amurallada y apreciar su arquitectura colonial, paseando por las calles empedradas y disfrutar de la plaza de la ciudad. De ahí pueden partir para conocer playa Blanca en la Isla Barú, donde podrán quedarse en cabañas o acampar. También pueden conocer sitios aledaños como Santa Marta, Isla de la Providencia, Isla del Rosario, Isla de San Andrés y demás cayos del mar caribe.
Parque Tayrona, Colombia
Está muy cerca de Santa Marta, por lo que pueden hospedarse en algún hostal económico o bien quedarse en Taganga. En el parque, que es muy grande, podrán disfrutar del sector de arrecifes, Playa Brava y hacer caminata, tomar un paseo a caballo y hacer camping. Para entrar al parque hay que hacerlo por el Calabazo. Si tienen oportunidad de trasladarse a Cartagena de Indias, una de las ciudades más hermosas de Sudamérica por sus calles con toque colonial, donde podrán encontrar castillos, murallas y callejuelas para perderse en su colorido, cercanas pueden encontrar playas como Bocachica o Isla de Tierrabomba. Cercana también queda La Boquilla, con manglar y playa, así como los baños de lodo en el volcán de Totumo.
Santiago, Cuba
Cuba es el destino caribeño por excelencia. Llegando al aeropuerto pueden disfrutar de La Habana vieja, conocer algunos sitios históricos además de la Plaza de la Revolución y las callejuelas, el malecón, el Coliseo y el Fuerte del Morro. Después pueden trasladarse a Santiago por tren, que será un recorrido largo, pero podrán observar la geografía del país. En Santiago, además de disfrutar el paisaje, podrán conocer museos y adentrarse más en la historia cubana. También hay zonas donde puede realizarse buceo.
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