Toda vida nocturna es una invitación al misterio, a lo oculto; el transitar por la ciudad durante la noche es el conocer a sus verdaderos habitantes sin miedos ni tapujos. Las posibilidades que brinda la obscuridad son infinitas para experimentar la existencia desde otras perspectivas. Para quienes gustan de salir a tomar un trago y bailar, no resulta ajena la aseveración de que las calles cambian drásticamente y aquellas que pueden parecer de lo más tranquilas durante el día, al caer la tarde, revelan su verdadero ser.
Así como hay bares y antros famosos en la Ciudad de México, también hay otros que prefieren guardarse prácticamente en el anonimato o hacerse de visitantes a través del paso de voz. Puede sonar a película o a que esto, en efecto, se hace en cualquier otro lado del mundo menos en este país; pero no, los centros nocturnos que se encuentran en un sótano o detrás de una desvencijada rockola en algún merendero, se pueden hallar donde sea.
Jules Basement
El mejor ejemplo de esto, es el Jules, en Polanco. Se encuentra en el sótano de un restaurante, en donde los comensales se empiezan a hacer preguntas al ver gente entrar al lugar, muy bien arreglada, para dirigirse a la cocina y no volver a salir. Y es que la entrada del bar se encuentra abriendo un refrigerador que dirige a las escaleras descendientes.
Main Room
En la colonia se puede caminar cerca de la media noche y percatarse que bastantes personas entran sin problema a un lugar que dice “Baños Roma”. Y no es precisamente que estén gozosos por entrar a unos vapores o algo así, sino que, al ingresar y tomar el elevador del edificio, se llega a uno de los bares secretos más buscados en la ciudad.
Parker & Lenox
Muy cerca de Avenida Reforma se encuentra un restaurante pequeño que sirve sencilla pero deliciosa comida americana; pero ese no es el único atractivo del lugar. En un rincón del local hay una pequeña puerta, como de bodega, que permite el acceso a un bar con estilo de los 20 y en donde se puede escuchar jazz.
Lewinsky
En una calle del barrio de San Angel, se encuentra un pequeño lugar que detrás de un librero esconde un antro donde se escucha, la mayoría del tiempo hip hop y otras mezclas electrónicas. Es posible contactar a la gente encargada de este lugar, pero el hacer una reservación no es tan sencillo.
Poe
Al igual que el sitio anterior, puede que se halle un número telefónico con qué intentar hacer contacto y reservar para una noche; pero este antro escondido en un restaurante cerca de la Fuente de Cibeles suele tener bastante demanda y no atiende fácilmente a la primera una solicitud.
***
Te puede interesar:
El antro donde los niños rusos pierden la inocencia
Los mejores antros en la Ciudad de México