Si bien es cierto que los viajes son el mayor premio de todas las horas que pasamos trabajando frente a un monitor, y una de las experiencias más gratificantes que cualquier persona pueda tener, sobre todo en la mejor compañía, te decimos por qué no hacer todos los viajes en pareja y de vez en cuando variar de acompañante.
Incluso aunque tengas otros amigos o familiares con los cuales puedas compartir un viaje, emprender una aventura solo de vez en cuando puede ser una elección bastante sana.
Pero, ¿por qué no compartir todos tus viajes con el amor de tu vida?
La mayor prueba de confianza
Viajar sin nuestra pareja, alejarse de casa, dormir en un lugar desconocido, conocer personas y vivir experiencias nuevas es la mayor parte de confianza, tanto para el que se va como el que se queda.
Permitirse un espacio y además sin tener que hablar todos los días por teléfono para saber si ya está solo en su cuarto de hotel demuestra mucha madurez y confianza, tanto así que podría decirse que es una relación exitosa que ni siquiera tiene dudas de si sería traicionado.
Satisfacción egolatra
¿Qué tiene de malo pensar sólo en uno mismo de vez en cuando? Un viaje debe ser una experiencia de instrospección en la que quizá pensar en dos no va. El desapego a la pareja y a la casa permite que regalarnos tiempo de calidad a nosotros mismos. Hacer lo que nos parezca lo mejor, comer lo que deseamos caminar por donde queremos, dejar de hacerlo en el punto en el que ya no podamos más. Dejar de cumplir las expectativas de un viaje perfecto en pareja en los que siempre hay algún desacuerdo, aunque sea insignificante.
Se contarán todo lo maravilloso que vivieron
Esa persona especial no podrá con la emoción de mostrarte las fotografías que tomó en su viaje, de contarte los detalles que más lo enamoraron, quizá incluso de regresar contigo alguna vez y llevarte a comer en donde probó los mejores sabores.
Además, quien se quedó también lo hará, aunque haya pasado cada día en la oficina, la vida siempre tiene algo que contar. Así que procura no textear en tu viaje cada que encuentras un punto con wifi libre.
Sorpresas al regreso de casa
Una de nuestras partes favoritas de que nuestra pareja regrese a casa, ¡son los regalos¡ Aunque suene un poco superficial, siempre es lindo ver qué eligió una persona que te ama cuando pensó en ti. Qué es lo que sabe que te encantaría tener y que te recuerde a esa persona siempre.
Le darás su espacio al otro
Vivir la vida sin una pareja, incluso en la rutina, cambia mucho las cosas. Al regresar de trabajar, puedes hacer más actividades que las que usualmente haces cuando esa persona está en casa. Quizá quiera ver una serie que el otro no disfruta, ver a algún amigo que hace tiempo no ve, hacer más ejercicio del que suele hacer…
Gustos distintos
Hay parejas medio disparejas que tienen gustos distintos, y eso está bien. Quizá tu novio desea ir a acampar a la montaña en medio de la nada y hacer una fogata, pero tú mueres de aburrición viendo la leña arder o tienes repulsión a los insectos. No tienen por qué hacerlo todo juntos, permítanse tener cada quien el tipo de viaje que desean con sus amigos, con su mascota o solos. No quieren arruinarle la experiencia al otro con malas caras o quejas.
Si ya son una familia con hijos…
El escritor Neal Pollack le obsequió a su esposa un viaje mientras él cuidaba de su hijo, para él después hacer lo mismo y tener un viaje solo. «Por unos días puedes maravillarte con ilusiones de juventud satisfechas, ir donde quieras, comer lo que quieras y usar el cuarto de baño sin oír tu nombre desde el otro lado de la casa», menciona Pollack.
Viaja con tus papás
…si aún eres afortunado de tenerlos. Los padres tienen ilusión de pasar tiempo con sus hijos en aventuras extraordinarias, sobre todo cuando ya no son pequeños. Ir a algún destino que siempre soñaron con conocer será una experiencia inolvidable para ustedes como familia. Si uno de tus padres ya no está, quizá sea el plan perfecto para que mamá o papá no viajen solos a un destino exótico, sino que juntos se pierdan y tú, como ellos lo hicieron contigo de pequeño, los consientas como tanto merecen.
Se extrañarán
Se darán cuenta de lo mucho que se aman y les gusta vivir la vida real el uno al lado del otro. Extrañarse es muy sano pues te puedes dar cuenta de cuánto amas a tu pareja. Ten por seguro que durante el viaje, tu pareja te tendrá en mente y al ver muchas cosas se acordará de ti. Quizá recibas fotografías que sólo ustedes dos entienden y nadie más.
Puedes seccionar tus vacaciones y destinar un viaje al año solo y otro con tu pareja, o bien uno con tu mamá y otro con esa persona especial. Viajar en pareja también puede ser lo más maravilloso, pero como bien sabes, hacerlo todo juntos, como muéganos, quizá conduzca a una relación monótona.
Si por otro lado, eres soltero y tienes ganas de conocer a alguien especial para recorrer el mundo, estos son 5 cruceros para solteros en donde podrías conocer al amor de tu vida.
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