Los amores nunca acaban bien, siempre alguien queda más herido…
Ya no puedo más, esto lo veo mal.
Entre tú y yo ocurrió una pausa, un stop, y ya nada volvió a funcionar.
De una imagen a un holograma, fuiste y te convertiste en un fantasma de la noche a la mañana.
No guardo silencio en el amor, te podría distinguir a grandes distancias con sólo tu olor.
Bastó sentir tu presencia para registrar en mí una nueva faceta, algo que tenía años de ausencia.
Despertó lo que una vez inicié y que luego descuidé, me desvíe y de repente con ella tropecé. Sólo bastó eso.
Figuró entre tantas, eran sus cachetes, una hermosa sonrisa y una cabellera larga.
Se fue alejando poco a poco como un río cuando se seca.
En su mente, mi recuerdo y textos la irán arropando, con el tiempo lo irá notando y, a su vez, no seré yo quien la extraño. Regresó a los brazos del pasado, ella se nota feliz o, al menos, es lo que trata de transmitir.
Esto lo veo mal. Nuestras huellas no se desvanecen de las manos que llegamos a tocar. Se podrá imaginar.
Yo con gusto la invitaría de nuevo a entrar, a que tome asiento y empiece a disfrutar lo que he escrito para alguien que no está.
Que te pregunte, te interrogue el pasado, ese al que fuiste y te entregaste de nuevo con los brazos cruzados.
Mientras duermes con dudas, tu cama y sábanas tratan de expulsar al equivocado.
¡Ja! Qué bonita te ves desde acá, charlando con tu almohada y mirando al techo sin poder hacer nada.
El tiempo y sus jugadas hará que nos volvamos a encontrar, la demora será que me vuelvas a tocar y sonrías esperanzada por una segunda oportunidad.
Es probable que de una noche no pase, como también puede suceder que no te alcance el tiempo y me escape.
De quedarme sería por la insistencia de tu cama y de la lencería que llevas puesta que a gritos me aclama.
Interrogantes quedarán por toda tu casa, mi nombre saldrá de tu boca de vez en cuando por equivocación, sé atenta y mantén el margen de error, pues por equivocación puedes perder tu relación.
Será tu decisión, de mi parte no habrá intervención, será una conversación privada entre tú y tu corazón.
Avísale que aunque no quiero, puedo. Con esto digo que en cualquier momento puedo entrar por tu ventana y sorprenderte de manera inesperada.
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Hay amores que son tan profundos que nos hacen morir poco a poco como si nuestro corazón fuera a desaparecer en cualquier momento… al igual que estas 10 canciones indie en español que deberías dedicarle al amor de tu vida.
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Las fotografías que acompañan al texto pertenecen a Jesse Herzog.