8 señales de que tus hábitos te están alejando de tener una relación

8 señales de que tus hábitos te están alejando de tener una relación

8 señales de que tus hábitos te están alejando de tener una relación

Cuando no sólo sales con él o ella sino con sus amigos, después de tu primera cita ten por seguro que serás objeto de especulación en un grupo de WhatsApp donde por lo menos 4 personas estarán al tanto de tus gestos, palabras y manías. Así que tienes que prepararte para eso…

No es que tengas que caer en una paranoia total, pero debes saber que hay algunos hábitos que –involuntariamente– están haciendo imposible que concretes una relación. Aquí algunas señales, todas aplican en hombres y mujeres:

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1 Eructar descaradamente

En algún punto de la relación —si llegara a existir tal— está bien darse ciertas concesiones de confianza. Es algo perfectamente natural e, incluso, espontáneo que sucede en una relación de tiempo. Pero cuando es la primera o segunda vez que se ven, está fuera de lugar.


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2. Morderte las uñas de manera compulsiva

Sí, está bien si mueres de nervios. Es completamente normal que sientas ansiedad o temor porque te gusta demasiado y quieres que todo salga perfecto. Pero la otra persona no tiene que notarlo. Además de que es visualmente desagradable, das una impresión de una extrema inseguridad y minusvalía. No lo hagas.


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3. Reventarte granos

¿Por qué sacarías pus de tu rostro frente a la persona que te gusta? No es atractivo en absoluto y tampoco crea un lazo de confianza o hace que te muestres “tal y como eres”. Es más bien una señal de que te importa muy poco lo que la otra persona piense de ti, lo que es un desmotivante para cualquiera.


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4. Postura encorvada

No vas con la idea de imponer respeto y autoridad, eso está claro. Quieres mostrarte como una persona accesible y sin prejuicios, pero no abuses. No es necesario que te muestres débil, vulnerable o frágil emocionalmente. La seguridad es un factor fundamental para gustarle a alguien más.


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5. Masticar con la boca abierta

Tu madre tenía razón: masticar con la boca abierta es de mala educación. Y no es que tengas que seguir al pie códigos altísimos de etiqueta para mostrar respeto sino simplemente no hacer cosas que puedan ser desagradables para los demás. El otro no tiene la necesidad de ver tus dientes devorando un pedazo de carne salvajemente.


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6. No lavarte los dientes

Además del aroma, no lavarte los dientes es visible y causa una muy mala impresión. No sólo se ve estéticamente mal, sino que eso da mucho que pensar respecto a tu cuidado personal: implica que no estás al tanto de tu salud y tu aseo, lo que hace dudar de tu estabilidad emocional. 

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7. Sacarte la comida con los dedos

¿Y si mejor esperas a ir al baño y revisar que todo esté en orden? No es necesario que lo hagas delante de esa persona. Mucho menos cuando te quedas mirando fijamente a los residuos sobre tus dedos. Iugh.

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8. Oler mal

No necesitas llevar el perfume más caro del mundo, con bañarte todos los días es suficiente. Podría parecerte una exageración, pero la sudoración que producen los nervios de ver a quien te gusta hace que sea muy evidente si te duchaste o no. Hazlo.

No se trata de dejar de ser tú o de fingir algo que no eres. Sino simplemente encontrar la manera de cuidar más de ti y manifestar ese bienestar interno. No permitas que el miedo y la inseguridad controlen tu vida, tampoco de que pienses que eres una persona llena de defectos y malos hábitos. Simplemente, esfuérzate un poco por no alejar a las personas de ti con detalles que fácilmente puedes corregir.

 

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