35 pasos para aprender a ser una mejor exnovia

35 pasos para aprender a ser una mejor exnovia

35 pasos para aprender a ser una mejor exnovia

¿Para qué ser la mejor exnovia?

A primera vista, la pregunta parece en extremo estúpida (por decir lo menos). ¿Quién querría ser una gran exnovia? ¿Para qué jugar un papel que a primera vista, luce decadente y humillante?

El problema es más grave de lo que parece: nada más terminar una relación, un sinfín de mujeres y hombres alrededor del globo se internan en un papel tan decadente como absurdo, el de expareja. Como si se tratara de una obra de teatro, durante semanas y meses, se esfuerzan por caracterizar un personaje común y que a todos les parece propio por lo sencillo que resulta interpretar sus distintas facetas: víctima deprimida, solitaria errante, triste y azotada.

Frente a los demás (y frente a ellos mismas) los individuos personifican una y otra vez este papel, hasta que su individualidad, su nombre, gustos e historia quedan reducidos a un simple estado civil: “exnovia”.

En realidad, la esencia del problema está en el olvido de sí mismos y la ceguera que, en vez de reafirmar al sujeto, niega la individualidad y se concentra en la expareja. Se es una mejor persona para sí misma, no para alguien más. ¿Cómo lograr superar el duelo y recuperar todo lo que perdiste en una relación luego de una ruptura? Aquí algunas respuestas:

Date cuenta de que nadie te pertenece .

Abre los ojos al mundo que te rodea y del que te privabas mientras tenías un compromiso.

Evita los pretextos absurdos para encontrarlo (objetos olvidados, felicitaciones, fechas especiales).

Corta toda relación con sus amigos o familiares que no consideras propios.

Descubre que puedes reír de nuevo.

No te engañes y despójate de toda esperanza por reencontrarse.

Aprende a valorarte e invertir el tiempo en ti misma.

Evita el sexo casual con él, puede ser el principio de una espiral decadente.

Si mueres de ganas por llamarle o buscarlo, denúnciate con tus amigas. Te ayudarán a sentirte mejor.

Aunque en ese instante lo consideres una opción viable, no salgas con alguien más sólo para olvidarlo.

Concéntrate en tus pasiones y evita refugiarte en el alcohol, las drogas o el sexo mismo.

Sal de cama temprano y duerme lo necesario. Es fácil caer en depresión y confundirlo con cansancio.

Piensa en cuántas millones de personas pasan por la misma situación a cada segundo y logran salir adelante.

Reencuentra a amigos, familiares y las personas que amas y de quienes te alejaste por estar ensimismada en él.

Atrévete a convertir el sentimiento en poder creativo y voluntad de salir adelante.

Evita stalkearlo en redes sociales y asimila que su relación terminó.

Escucha a quienes amas: siempre tendrán algo que decirte.

Recuerda que nunca es tarde para crecer personal y profesionalmente.

Aprende de las experiencias: ¿recuerdas que creías que tu novio anterior era el amor de tu vida?

Da y recibe muestras de amor. No es un sentimiento exclusivo de las parejas.

No te quedes con las ganas: explora tu sexualidad, conócete a ti misma y a otras personas con responsabilidad.

Prepara un viaje en solitario o con amigas a un lugar desconocido. Tendrás una nueva perspectiva a tu regreso.

Intenta estar bien sin ser feliz todo el tiempo. La felicidad se construye en el camino.

Aléjate de la rutina y date cuenta de que hay un sinfín de cosas por hacer y disfrutar.

Rompe con los estúpidos tabúes de la sociedad que creen que está mal estar soltera y disfrutarlo.

Ahorra y gasta todo tu dinero de la forma que mejor te convenga. Adiós a los regalos para su familia.

Reconfórtate sabiendo que en ti no quedó y siempre intentaste dar todo por la relación.

Recuerda que es mejor terminar a vivir engañada o imaginar un mundo ideal.

Deja de sufrir. Tu vida no es una telenovela, disfruta incluso de los días grises.

Evita la típica idealización y no sólo pienses en los primeros meses, cuando todo era mágico entre ambos.

Abre los ojos y date cuenta de que su relación no tenía futuro.

No hagas de tu ruptura un tema tabú, tampoco el asunto de cada charla.

Evita el autosabotaje y elige la realidad aunque parezca difícil. El tiempo todo lo cura.

No intentes lucir fuerte si no te sientes bien, pero no dejes de hacer cosas por tristeza.

Disfruta de tu individualidad, nadie se preocupará tanto por ti como tú.

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