Al despertar el lunes 20 de junio, las redes sociales, noticieros y medios de comunicación una vez más se vieron tomadas por fuertes imágenes sobre los hechos de violencia que sucedieron el domingo anterior en Oaxaca, dejando un saldo de al menos ocho muertos y un centenar de heridos.
En sus comunicados oficiales, la Policía Federal aseguró que no se usaron armas de fuego, pero por medio de fotos y videos difundidos se demostró lo contrario, razón por la cual el comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo, aceptó el uso de dichas armas.
En diferentes videos se puede ver cómo elementos de seguridad pública golpean a civiles y maestros, hombres y mujeres; por otra parte, hay otros en los que se puede ver a civiles respondiendo a las agresiones y vandalizando establecimientos, golpeando y quemando carros, y propiedad privada.
¿Dónde quedo el país en el cual crecimos jugamos en la calle y parecía existir seguridad?
¿En qué momento México se transformó en un país donde la policía secuestra y asesina estudiantes, maestros son golpeados y asesinados a plena luz del día por quienes deberían protegernos? Muchos políticos y funcionarios públicos abusan de sus puestos, y grandes segmentos de la población se aprovechan de cualquier suceso de orden social o natural para saquear establecimientos y actuar de manera brutal.
¿Por qué no logramos comprender que la violencia nunca es la solución?
Al escribir este artículo recuerdo Tlatelolco, donde actos similares se llevaron a cabo hace más de 48 años, sólo por mencionar uno de los tantos hechos que han ocurrido a través de las décadas en nuestro país. Parecería que el mexicano no tiene memoria, pues siguen ocurriendo este tipo de situaciones que lastiman, pero al parecer no lo suficiente como para hacer algo en conjunto con la sociedad.
¿En qué nos diferenciamos de países como Islandia, donde miles de personas exigieron la renuncia de su primer ministro Sigmundur Gunnlaugsson, después de la filtración de los famosos “Papeles de Panamá”?
En México tenemos el caso del empresario Juan Armando Hinojosa, propietario de grupo Higa
-conocido anteriormente por el famoso escándalo de la Casa Blanca- que según estos mismos documentos, ha recibido más de 750 millones de dólares por parte de agencias del gobierno mexicano, claramente vinculándolo con nuestro presidente, quien sigue en su mandato sin represalia.
Analicemos brevemente la situación que México vive actualmente
– Van más de 100 periodistas asesinados desde el 2000; Carlos Lauría, Director y coordinador senior del programa de las “Américas del Comité para la Protección de los Periodistas” (CPJ) declara que México es “uno de los países más peligrosos para ejercer esta profesión”.
– 61 mil 018 asesinatos durante gobierno de EPN, según cifras oficiales. Esto quiere decir que diario se asesinan a 53 personas en la república.
– Ayotzinapa, 43 estudiantes de la escuela normal rural se encuentran desaparecidos y no hay respuesta o acción concreta por parte del gobierno.
Y la lista sigue.
Retomando lo ocurrido en Oaxaca, el problema comenzó en 2006 cuando los maestros de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación levantaron un plantón en el centro de Oaxaca, donde aproximadamente 80 mil maestros exigieron mejor calidad en las escuelas oaxaqueñas, además de mejorar el mantenimiento y estado en escuelas de zonas rurales.
Bajo ordenes del gobernador Ulises Ruíz Ortiz, tratando de cumplir un compromiso de campaña de no dejar manifestaciones en el centro, se desalojó a los maestros con gas lacrimógeno y balas de goma. Ante la violencia, estos respondieron con piedras y palos sin abandonar el plantón.
A poco más de 10 años el panorama no mejora. Las reformas educativas implementadas por el gobierno actual sólo presionan la ya compleja situación.
Es fácil culpar al gobierno, que al ordenar actos como los que sucedieron el domingo, denota que no tiene las herramientas políticas necesarias para solucionar problemas de forma diplomática y pacífica. Por otro lado, mucha gente culpa a la CNTE, pero tampoco es tan fácil.
Llama la atención que uno de los estados con peor nivel educativo tenga profesores que salieron del aula hace 10 años para manifestarse, pidiendo mejores escuelas y condiciones laborales, y hoy se nieguen a realizar las evaluaciones necesarias para garantizar un grado educativo adecuado.
Lo que es claro es que como ciudadanos, al insultar y generar prejuicios en redes sociales sobre los actos ocurridos, no cambia ni ayuda en nada, sólo nos da la ilusión de estar involucrados y sentirnos parte de una solución que no comienza a dibujarse en el horizonte.
Desde que era pequeño siempre quise ser músico. Mis ídolos eran personas con características que encontraba muy atractivas: palabra clara y firme ante sus ideales, convicciones sociales fuertes y propuestas de cambio que eran libremente expresadas.
Para mí es triste ver que en estos tiempos existe una carencia de líderes positivos.
Con esto en mente invité a algunos amigos artistas que admiro a que comenten sobre esta situación, alcen la palabra y den su punto de vista, esperando que este artículo, junto con las reflexiones generen una reacción en quien lo lea:
“Los maestros son la fuente que nutre de conocimiento a nuestros niños, y es triste que los pisoteen de esa manera cuando exigen se cumplan sus derechos”.
Pepe Mogt, Músico, Nortec
“Oaxaca, barro negro , niebla, tierra, niños, olvido, desesperanza, boca; Oaxaca, nota, canción, sangre, mezcal, sol, nube, color, quesillo, chapulines, rateros, podredumbre, besos y luna. Oaxaca, canción, ancestros, mestizaje, guerra, dolores ocultos; flores en la azotea, moches, Toledo, injusticia ,sonrisa. Oaxaca, despojo, sabiduría, calles, bellas mujeres , paisaje, pupilas; sol que se esconde, metralleta, flor, azotea, amores y besos; versos, poesía, miel y lágrimas. Idiomas, iguanas, canciones zapotecas, armadillos, despojo. Despojo, verdades aullando, dolores, despojo…Oaxaca, la luna girando girando…navegando por los sueños que no llegan, no llegan, navegando por los sueños que nunca llegan. Oaxaca …despojo navega por los sueños que nunca llegan”.
Tonana, cantante, compositora.
“Yo nací en Colombia pero elegí México como mi Patria adoptiva. Llegué aquí lleno de sueños e ilusiones. De alguna manera, llegué a mi lugar ideal, pero todo lo que está pasando me llena de dolor y de miedo, y me desconcierta, pues “Yo” no quiero que mi lugar ideal sufra esto. Hoy escucho voces que se alzan por todo lo que actualmente pasa, pero desde hace 11 años -cuando llegué a México- veo lo mismo; escucho las mismas voces y aunque la gente cambia, pocas cosas cambian en México. Lo mejor que podemos seguir haciendo como personas es vivir de manera positiva y transmitirle esa luz a otros, y como artistas, aprovechar que nuestra voz llega a muchos oídos, y entregarles el mensaje correcto”.
Jairo Guerrero aka B-Liv. Dj/Productor, Director Creativo, Consultor de Marketing
“La falta de información provoca falta de argumentos, y la ausencia de estos provoca violencia. Parece que el mismo gobierno no tiene un diagnóstico de país, aunque en realidad deberían ser muchos diagnósticos. La sociedad no cuenta -no contamos- con la información suficiente sobre las diversas posturas que se contraponen, por lo que se desata un nuevo tipo de enfrentamiento: el opinólogo aséptico que todo lo sabe y nada resuelve, sea cual sea la causa que apoya. Esto sólo contribuye a la desinformación, falta de argumentos y eventual aceptación del uso de la fuerza para, paradójicamente, sostener sus reacciones. Lo sucedido en Oaxaca es para mí, un ejemplo claro de esto”.
Nacho Vargas. Orfebre, Premio Nacional de la Plata 2010
“La violencia nunca es la solución. Es una tristeza que en el mundo, después de tanta violencia en nuestro país, aún sigamos cayendo en los mismos hábitos. La solución es la educación. Sin embargo, los lamentables hechos recientes confirman que la lucha aquí va en contra de la solución: un país sin educación y en caos es más fácil de controlar”.
Morgan Szymanski, Músico, Guitarrista Clásico
“Es increíble que para combatir al narcotráfico nunca se haya visto un despliegue de fuerzas armadas similar al que se ve en Oaxaca, y que además el ejército alegue que las víctimas mortales “no eran maestros” como si esto fuera una justificación válida. Un gobierno en el que vivimos los escándalos de la Casa Blanca, dos fugas del Chapo, Tlatlaya, Ayotzinapa, Oaxaca, la depreciación más grande del peso y cierra las puertas a la Ley 3 de 3 no está a la altura de nuestro país”.
Alex Otaola, Guitarrista, músico, San Pascualito Rey, Santa Sabina.
Estas letras están aquí para llamar a la reflexión, los invitamos en los comentarios a expresar su libre opinión.