Todo lo que debes saber antes de decidir adoptar un perro

Todo lo que debes saber antes de decidir adoptar un perro

Todo lo que debes saber antes de decidir adoptar un perro

¿Sabías que cada año cerca de 500 mil perros y gatos son abandonados en México? Desafortunadamente, así lo confirma Emmanuel Pedraza, director general de la asociación civil Defensoría Animal. Muchas de esas mascotas abandonadas por sus dueños suelen ser regalos de Navidad, Día de Reyes o San Valentín. Aunque la alegría y el apego es breve, pues cuando los cachorros crecen o se convierten en un inconveniente o en una carga, los dueños optan por abandonarlos a su suerte.

Considerando la cifra anterior y antes de pensar en comprar una mascota, ¿por qué no le das una oportunidad a ese medio millón de animales que cada año son abandonados en nuestro país? Es verdad que un perro en adopción probablemente no será “de raza” no tendrá pedigree, pero muchos dueños de perros adoptados aseguran que tienen un carácter excepcional, son sumamente fieles, agradecidos y cariñosos.

Pero una vez que decidiste que adoptar es la opción para ti, ¿qué sigue? ¿Cuáles son los pasos a seguir para adoptar a un perro o un gato de manera segura para ti y, por supuesto, para el animal? Una excelente manera de explorar el terreno de la adopción en tu localidad son las cientos de páginas de adopción en Facebook que comparten información de perros y gatos de todas las latitudes. Por lo general, debes pedir unirte al grupo. Los organizadores te mandan un cuestionario a través de la misma red social donde les explicas qué tipo de perro buscas —talla, sexo, personalidad, antecedentes de salud, etcétera.

Una vez que llenas el formulario, los organizadores decidirán si aceptarte como miembro del grupo. Como en cada grupo, es importante que sepas que existen reglas claras. Pero la más importante de ellas que debes tener en cuenta en todo momento: ¡nadie debe ofrecerte una mascota por alguna cantidad de dinero! Son perros que se dan en adopción, así que no hay razón para pedirte dinero a cambio —a menos que este sea para apoyar y cubrir gastos de esterilización o vacunas. Si notas alguna actitud sospechosa o agresiva, debes reportar de inmediato a los organizadores para que expulsen a dicha persona del grupo.

Una vez que te aceptan en el grupo, debes escribir en el muro de la página qué tipo de mascota estás buscando. No olvides compartir las zonas de la ciudad —o fuera de ella, si está dentro de tus posibilidades viajar— en las que podrías recoger al perro. Notarás que pronto recibirás comentarios con información sobre mascotas en dichas zonas. Reiteramos que es muy importante que especifiques en qué zona vives, pues así la persona que te ofrezca una mascota en adopción sabrá qué tan cerca estás de su ubicación.

En ocasiones, las personas que ofrecen perros en adopción forman parte de refugios o centros en los que cuidan a decenas de perros, así que tendrás la oportunidad de pedir información y fotografías de todos los perritos para averiguar cuál de ellos es la mejor opción. Una vez que elijas, debes ponerte de acuerdo para saber si debes ir por el perro o si existe la posibilidad de que lo lleven a tu casa. Independientemente de lo anterior, es importante que consideres que las personas que dan en adopción a estos animalitos deben conocer o tener evidencia de cómo es tu casa, para saber si el perro tendrá espacio suficiente, si convivirá con otros perros, en qué parte de la casa se quedará —por ejemplo, nunca debería estar en la azotea—, con quiénes convivirá, si hay zonas u objetos peligrosos para la integridad del perro, etcétera. Desconfía de quienes no se preocupen por esta información y te entreguen un perro sin saber en qué condiciones vivirá.

En algunas ocasiones y con previo acuerdo, cada mes la persona que te dio en adopción al perrito irá a tu casa a visitarlo para ver cómo está. Así lo hará durante los seis primeros meses. De hecho, es posible que también tengas que entregarle una copia de alguna identificación oficial, una carta firmada comprometiéndote a salvaguardar la integridad del perrito y con la posibilidad de que si la persona visita al animalito y ve que no está bien, en cualquier momento puede llevárselo para brindarle seguridad. Una vez que pasaste los seis meses de prueba y visitas, te dan la oportunidad de que sea sólo tu perro. Debes firmar un papel donde quede estipulado que el perro es tuyo, que ya es tu mascota oficialmente. Eso sí, no olvides que debes comprometerte a esterilizarlo si es que aún no lo han hecho.

Por otro lado, considera que al ser perritos que nacieron o crecieron en la calle no podemos saber con exactitud cuál será la talla que alcanzarán. Entonces debes ser muy claro en el tipo de mascota que quieres adoptar y saber si realmente le podrás ofrecer un espacio ideal para que pueda vivir y jugar. En cuanto te entreguen a tu mascota debes ponerle sus vacunas y desparasitarlos, así que contempla que la llegada de un nuevo miembro a tu familia también implicará que destines parte de tu dinero en veterinario, estilista, juguetes, productos de higiene, comida, etcétera.

Tener un perro, amarlo y cuidarlo es lo mejor que nos puede pasar. La oportunidad de darle techo, comida y amor a un perrito nos puede hacer muy felices.

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Para los que quieren conocer los misterios de los perros a través de la historia pueden leer La Orden del Pug: una sociedad secreta dentro de los masones o la historia del perro que se convirtió en santo y la Iglesia prohibió.

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