Este artículo fue publicado originalmente por Mariana Tiquet el 19 de febrero, 2015 y ha sido actualizado por Cultura Colectiva.
Tras la frontera más vigilada del mundo se localiza una nación de la que poco hemos logrado conocer y de la que –quizá la mayoría de las veces –lo que se nos presenta ha sido seleccionado para salir y compartirse con el resto del mundo.
La República Popular Democrática de Corea, mejor conocida como Corea del Norte, es una nación que se ha caracterizado por su gobierno autoritario y el poco contacto que tiene con el exterior. Es un país con un gobierno que se rige por la idea de Juche, que significa “que los propietarios únicos de la revolución y la construcción posterior son las masas”. Una nación que para muchos se define en una sola palabra: comunista.
La realidad es que viajar desde el extranjero es bastante complicado y casi imposible, por lo que pocos han sido testigos de la realidad de dicho país. Nos hemos tenido que conformar con imágenes que se nos han presentado, incluso muchas de ellas proporcionadas o autorizadas por el mismo gobierno.
El fotógrafo Eric Lafforgue buscó la forma de mostrar la realidad de este país. Sus imágenes nos muestran seres humanos que no deberían ser comparados con robots, tal como explica el fotógrafo. Él quería mostrar personas que sufren. Después de viajar desde 2008 a Corea del Norte, utilizó memorias digitales para sacar imágenes que la nación comunista prohíbe.
De acuerdo con Lafforgue, las fotografías presentadas a continuación son imágenes que el Jefe de Estado Kim Jong-un no quería que el mundo viera.
Una mujer resalta entre un grupo de soldados. La fotografía no se debería haber tomado debido a que los oficiales no permiten imágenes del ejército.
«Se ha dicho que el Ejército Norcoreano es uno de los más importantes del mundo. Pero si viajas aquí, verás frecuentemente a soldados haciendo tareas domésticas como ayudar a los agricultores».
«Fuera de las áreas urbanas, esta escena es muy común».
«El sistema de metro de Pyongyang es el más profundo del mundo ya que funciona como un refugio aéreo. Alguien me vio tomando esta fotografía y me dijo que la borrara ya que salía el túnel».
«Los oficiales del Ejército Norcoreano odian cuando tomas este tipo de fotografía. Incluso, cuando les expliqué que la pobreza existe en todo el mundo, en mi propio país también, me prohibieron tomar fotografías de los pobres».
«Cuando los tiempos son difíciles (usualmente lo son), se pueden encontrar niños trabajando en granjas colectivas».
«Por un largo tiempo, las prohibiciones contra las ventas en el mercado negro han sido estrictamente aplicadas. Los vendedores del mercado gris son más comunes. Ganan poco dinero vendiendo cigarrillos o dulces».
«Durante el festival Kimjongilia, miles de norcoreanos deben hacer fila para visitar diversos monumentos».
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«Se supone que Pyongyang sea el escaparate de Corea del Norte, por lo que los exteriores del edificio han sido cuidadosamente mantenidos. Cuando tienes la rara oportunidad de ver el interior, la sombría verdad se hace evidente».
«En Pyongyang los autos son ahora más comunes, los peatones todavía se están acostumbrando a verlos. Los niños juegan en medio de las avenidas principales como lo hacían antes de que los coches estuvieran a la vista».
«Una noche, en el camino de vuelta al hotel mi camión tuvo que tomar una ruta alternativa debido a los cierres en las calles. Mientras pasábamos frente a unos edificios viejos, los guías me pidieron que no tomara con flash. La razón oficial era para evitar asustar a la gente».
«Una visita a un hogar rural. Esas casas y las familias que ahí viven son seleccionadas cuidadosamente por el gobierno. Pero, a veces, un detalle como un baño utilizado como cisterna muestra que los tiempos son difíciles».
«El transporte público que conecta con las ciudades más cercanas casi no existen. Los ciudadanos necesitan permisos para ir de un lugar a otro. En las carreteras, puedes encontrarte con soldados que te paran».
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«Mostrar la pobreza está prohibido, pero mostrar la riqueza es también un gran tabú en Corea del Norte. En un parque en un domingo por la tarde, encontré este coche que pertenece a alguien de la elite de Pyongyang».
«Está prohibido tomar fotografías de soldados descansando».
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«También está prohibido fotografiar la desnutrición».
«Te puedes encontrar con toda clase de comidas y bebidas en los dos supermercados de Pyongyang, donde las cosas se venden tanto en euros como wons. Incluso tienen agua Evian. Sólo la élite puede comprar ahí».
«Cuando vas a ver a los delfines en Pyongyang, puedes fotografiar a los animales, pero no a los soldados que son el 99 por ciento de la gente».
«La paranoia es común en Corea del Norte». Lafforgue tomó esta fotografía y le pidieron que la borrara ya que estaban casi seguros que podría haber dicho que se trataba de indigentes, cuando en realidad era una madre y su hijo descansando en una banca.
Los soldados no permiten que les tomen fotografías.
Este soldado estaba durmiendo. “Esta fotografía contribuyó sin duda a que me prohibieran entrar al país”.
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Sólo la élite puede comer en los nuevos restaurantes que han abierto en la capital.
«Nunca tomes una fotografía en donde la gente haga cosas tontas frente a los retratos del Kim».
«Fui a Chongjin, una ciudad en el norte que sufrió mucho de hambre hace unos años. Me confiscaron la cámara durante el viaje en autobús. Una vez en el hotel, entendí por qué, cuando vi a la gente en la calle».
«Cuando visitas familias, los guías aman que tomes fotografías para que le muestres al mundo que sí tienen computadoras. Pero cuando ven que no hay electricidad, te piden que las borres».
La fila para tomar el camión.
Cuando un camión se descompone.
«En el centro de arte de Pyongyang, experimentamos un apagón, un evento diario que los norcoreanos odian a mostrar. Cuando esto sucede, te dicen que es por el embargo estadounidense».
«El dinero es un tema tabú en las conversaciones de Corea del Norte. Es muy difícil entender cuánto ganan las personas, el costo de vida, etc… Cuando tomé esta foto de la cajera contando mucho dinero, no fue muy buena idea».
Conoce la serie completa de Eric Lafforgue.
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