Una de las figuras claves de la tranformación del siglo XIX al XX en el arte español fue Sorolla, artista que pintó más de dos mil cuadros. Su trabajo estuvo, en un momento, influido por el Impresionismo; sin embargo, su obra se ubica en la corriente del Luminismo, y a pesar de no haber sido el creador de ésta, sí fue la figura central en España.
Más de 50 pinturas y dibujos del artista valenciano, de quien en este 2013 se conmemoran los 150 años de su nacimiento y los 90 de su muerte, se presentan, desde el jueves 21 de marzo en la exposición Prodigios de la luz. Sorolla y sus contemporáneos, en el Museo Nacional de San Carlos, como una de las actividades de celebración en el marco de los 45 años de este recinto.
La base de la exposición son 15 obras de Sorolla provenientes del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, Cuba, y piezas que son propiedad de colecciones públicas y privadas.
La familia, los niños, las mujeres, el paisaje, la fiesta, los pescadores y el mar de Valencia, fueron los temas centrales de sus pinturas.
Manuel Crespo, curador del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, encargado de la exposición en México, y especialista de la obra en Sorolla se refirió:
“Es un pintor que tiene magia para cohesionar los elementos del color, la luz, las formas. Es una fórmula muy bien trazada, que hace que uno se rinda ante la visión del cuadro”.