Pocas cantantes de pop pueden decir que estuvieron más de cuatro años en la prisión. Pero también no son muchas las que son acusadas de corrupción de menores, secuestro, trata de blancas y hasta de abuso sexual. Gloria Trevi tiene una de las historias más complejas en la historia del pop internacional. Siendo uno de los íconos más importantes de los 90, su vida se vio opacada por su relación con Sergio Andrade –a quien ahora acusa de múltiples abusos físicos y psicológicos–.
Nacida en Monterrey, Nuevo León, Gloria de los Ángeles Treviño Ruiz decidió irse de su hogar a una corta edad (17 años) para perseguir una carrera musical. En 1985, creó una banda llamada Boquitas Pintadas y al poco tiempo conoció al hombre que la atormentaría durante años, Sergio Andrade, un exitoso productor y entrepeneur que le ofreció el mundo, siempre y cuando siguiera sus instrucciones al pie de la letra.
El hombre no mintió y convirtió a Gloria Trevi en una de las estrellas más grandes de la época. Junto a él se transformó en la “Madonna” mexicana, con una actitud rebelde, una fuerza natural para el rock pop y una voz que podría hacer llorar a cualquiera. La mujer era una profesional, pero conforme el éxito fue creciendo, los negocios de Sergio Andrade se hacían cada vez más oscuros hasta que se quedó encerrada dentro de una trampa de la que no podría escapar.
A pesar de tener una carrera prolífica a lo largo de los 90, incluso creando películas que acompañaban sus más grandes éxitos, Gloria Trevi decidió alejarse de los reflectores en 1996 para cuidar a Sergio Andrade, quien había sido diagnosticado con cáncer. Sin embargo, muchos sospechan que en ese tiempo su negocio era el de la trata de personas, algo de lo cual –según ella– no estaba enterada. En el año 2000, la mujer fue arrestada junto con María Raquenel (Mary Boquitas) siendo acusadas de corrupción de menores por el caso de Karina Yapor, una chica que fue víctima de rapto, violación y que aseguraba que era vendida por el ahora llamado “clan Trevi-Andrade”.
El resto es obra del sistema judicial mexicano. Andrade, el responsable principal, fue sentenciado a 7 años 10 meses, pero al poco tiempo fue absuelto de unos cargos y finalmente pagó una fianza para salir de la prisión. Por su parte, Gloria Trevi se alejó completamente del hombre y aseguró ser una víctima más del hombre, y eventualmente regresó a los reflectores. Sobre qué sucedía tras bambalinas, nadie sabe realmente, excepto Trevi, cuya historia ya llegó a la pantalla grande, y se ha replicado en decenas de medios.
Desde entonces, Gloria Trevi ha seguido cosechando éxitos, convirtiéndose en una figura líder del movimiento LGBTQ+ y sigue haciendo apariciones en el escenario, siempre manteniéndose fresca y feliz. No pierde oportunidades para hablar sobre cómo las mujeres son engañadas por hombres que les ofrecen el mundo entero y que terminan siendo víctimas de distintos tipos de violencia o traiciones. De cualquier forma, Trevi es un ícono que siempre se mantendrá fuerte.