A veces, el camino fácil parece ser quedarse callado e ignorar las emociones que se apoderan de la mente, tragárselas para jamás escupirlas y digerir toda clase de sentimientos. En la sociedad contemporánea, las emociones como tristeza, añoranza, enojo o desesperación se etiquetan como negativas o simplemente como debilidades. Se tratan de esconder a toda costa reprimiendo su manifestación, cuando en realidad es de lo más normal sentirse en algún momento con desánimo, coraje o molestia por un sinfín de preocupaciones que afectan a la vida diaria.
El verdadero riesgo ante las emociones está en tratar de ignorarlas en vez de gestionar la intensidad de un sentimiento y encauzarlo hacia buen puerto. La sabiduría popular dice que lo mejor es desahogarse y sacar los sentimientos (buenos o malos) para evitar enfermedades. Dichos populares como “hacer bilis” o “te van a salir piedras en el riñón” en realidad no están muy alejados de la realidad científica: la alexitimia, conocida como el trastorno que impide expresar los sentimientos, provoca cambios negativos en las regiones cerebrales de la amígdala y la corteza insular, según estudios de la Universidad de Stanford, publicados en la revista Biological Psychiatry.
Quedarse con las emociones provoca depresión crónica, acompañada de frustración, baja autoestima y afecta las relaciones sociales alrededor de la persona con alexitimia. Estas son siete razones de peso para comenzar a cambiar la forma en que administras tus emociones y gestionarlas de una forma más sana:
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Aumenta la frustración
Aprender a expresar las emociones es una forma eficaz de alejar la frustración y el estrés. Si amas a alguien, asegúrate de hacérselo saber, si estás indignado por un problema laboral, no dudes en acercarte a la persona adecuada y darle a conocer tu punto de vista. En la medida en que las personas aprenden a describir sus sentimientos con certeza, la amargura y falta de realización se alejan mientras eres escuchado y resuelves las problemáticas que se presentan.
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Provoca depresión
Está comprobado que los estados depresivos crónicos tienen una relación con la incapacidad de las personas para comunicarse con los demás y demostrarles sus sentimientos reales. La frustración genera un estado de aislamiento mental que a largo plazo termina por convertirse en soledad a pesar de estar acompañado. Las personas que no expresan lo que sienten tienden a creer que nadie puede sentir lo que ellos y por lo tanto, nunca les entenderán.
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Decae el autoestima
Una persona segura de sí misma sabe que expresar sus sentimientos es un derecho y una obligación que tiene ante la vida, su salud física y mental, las personas en su entorno y todo cuanto le rodea. Describir sin pesar y sinceramente, desde la comida que no te agrada hasta un problema serio que debe ser discutido en pareja, es un pilar de la autoestima y valoración. Tu opinión es igual de importante que la de todos los demás.
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Provoca malentendidos
Hablar con soltura sobre los sentimientos que vives más frecuentemente ayuda a las personas en tu entorno directo a conocerte mejor, estar al tanto de tu personalidad, la forma en que manifiestas tus sentimientos y genera empatía, que mejora la convivencia diaria. Además, las relaciones mejoran notablemente cuando la información fluye sin complejos en un entorno familiar, laboral o de pareja.
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Te carga de presión
Todo mundo ha sentido la necesidad de compartir una charla con alguien más y hacer una declaración, confesar un secreto o desahogarse sobre las penas que experimenta en su vida. A pesar de que no es nada fácil entablar una conversación de este tipo, un sentimiento de alivio y ligereza se apodera después de dejar salir todo lo que tenías dentro. Aprende a liberarte de la presión, escuchar y expresar a las personas de tu entera confianza todo aquello que conlleva una carga innecesaria.
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Afecta la comunicación
Un básico en toda relación exitosa –independientemente de su naturaleza– es crear un canal de comunicación eficiente que permita a cada uno de los integrantes sentirse cómodos y seguros de expresar todo lo que pasa por su mente y que requiere la atención y el conocimiento de los demás.
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Provoca arranques de ira
Tragarte todo sentimiento y sellar tus labios es la mejor forma de acumular emociones negativas que en el futuro forzosamente tendrán que explotar. Tu aparente estoicismo se puede transformar en un arranque furioso que te lleve a actuar o decir cosas de las que después puedas arrepentirte. Mejor expresa tus sentimientos de forma sincera y lo más pronto posible, platica sobre lo que te incomoda y concéntrate en aquello que no te hace bien.
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Desarrollar habilidades asertivas es la mejor forma de comenzar una introspección y cambiar todos esos aspectos negativos en la rutina diaria. ¿Eres una de esas personas que hace planes y tiene todo para realizarlos, pero al final, por alguna razón incomprensible, termina arruinando todo? Lee estas formas de evitar el autosabotaje y dejar de ser tu peor enemigo para saber de qué se trata y cómo romper con ese mal hábito. ¿Cuál es el mejor camino para iniciar de nuevo después de una ruptura? No te pierdas de los 10 hábitos para recuperar la confianza en ti misma y conseguir pareja.