El primer paso para fracasar en el amor es poner condiciones o crear falsas expectativas. Machistas o no, existen hombres que cometen el error de pensar que sólo bajo ciertas circunstancias alcanzarán la felicidad cuando deciden comenzar una relación sentimental. Tal vez ocurra lo mismo con las mujeres (es probable que sea una condición natural de la humanidad crear castillos en el aire), pero el sexo masculino es propenso a echar a volar sus ideales en torno a cómo sería la relación perfecta.
¿Cuáles son algunas de las falsas expectativas que los hombres tienen sobre la relación perfecta? Descubran, lectores, si han caído en alguna de las siguientes actuaciones.
Su pareja siempre estará disponible para él
Es decir, espera que la otra persona lo deje todo para estar con él, escucharlo, apoyarlo, que su mundo gire alrededor de su persona antes de atender sus otros temas personales o profesionales. Hay hombres tan egocéntricos que esperan que ellos sean el foco de atención de cada uno de los esfuerzos de su pareja sin entender que la independencia es fundamental.
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Habrá sexo todo el tiempo
El sexo es hermoso y necesario para el bienestar de una pareja, pero no es el pilar de una relación. Algunos hombres piensan que su pareja debe estar disponible las 24 horas para acostarse con él en cuanto sus deseos lo demanden, o que tiene la obligación de cumplir sus fantasías, aun en contra de su voluntad. Ninguna relación puede ser perfecta si se demandan acciones que perjudiquen a la otra parte. A veces simplemente no se antoja tener sexo y no tiene nada de malo.
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La relación de su pareja con sus amigos o familiares será perfecta
Por desgracia, esto no siempre ocurre. Las múltiples maneras de pensar, una primera impresión falsa, o simplemente la ausencia de química entre las partes involucradas, hacen que las relaciones entre su pareja y su entorno más cercano sea tenso. Esto puede perjudicar o no la relación entre un hombre y su pareja, dependiendo de la manera en que la situación se lleve.
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Todo el tiempo estarán felices
¿Acaso los hombres y la humanidad en general siempre están felices consigo mismos? Entonces, ¿por qué algunos hombres exigen que en una relación impere por siempre la felicidad y la armonía como sinónimo de perfección? En ocasiones una discusión es necesaria (y natural) no sólo para el intercambio de ideas sino para conocerse mejor y evolucionar juntos. Sí, pocas veces es agradable discutir pero hay que asumirlo como una consecuencia natural de la convivencia estrecha con alguien.
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Pasarán por alto sus defectos
Tal vez al principio de una relación los defectos se vean como algo divertido o pasajero, pero con el paso del tiempo, y si una de las dos partes no hace nada por solucionarlos, se pueden volver un dolor de cabeza y terminar con la relación. Algunos hombres esperan que su pareja no les recrimine absolutamente nada, pensando que eso los llevará a la perfección de su relación, pero siendo sinceros es algo imposible: los defectos tarde o temprano serán señalados.
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Su pareja deberá pensar como él
Sí, por supuesto que hay hombres que esperan que su otra mitad sea una calca de sus pensamientos. De esa manera ellos podrán decir que su relación es perfecta y que están tan compenetrados que sus pensamientos son casi gemelos. No es imposible que esto exista, pero es algo sumamente complicado: la variedad de ideas es una constante en una relación y el secreto para que funcione es crear acuerdos donde nadie salga perjudicado.
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La mentalidad de la otra persona tiene que ser muy abierta
La apertura como sinónimo de emoción es algo que muchos hombres tienen como vital importancia, lo cual significa que su pareja tendrá que aceptar experimentar con cosas nuevas: lugares, personas, situaciones, maneras de pensar y un largo etcétera. Algunos hombres ven esto como una muestra de amor, de variedad y de darle cosas nuevas a una relación, sin ponerse a meditar si la otra persona está de acuerdo con ello.
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Que levante la mano quien no quiera que su relación sea perfecta. La gran mayoría de los humanos deseamos que no existan los defectos en un noviazgo o matrimonio, pero esto es algo lejano y difuso. En realidad, las relaciones exitosas no son las aparentemente perfectas sino las que saben lidiar con las virtudes y defectos de su pareja, viéndolas como una oportunidad de evolucionar juntos.