Se vieron, se gustaron, se dieron y nunca se volvieron a ver. En esta historia no hay héroes, villanos ni corazones rotos; sólo dos personas que decidieron disfrutar el momento y se entregaron el tiempo preciso para descubrirse profundamente sin conocerse a fondo. En otra época, la mayoría de las mujeres se habría negado a protagonizar un romance breve como éste por el temor a ser juzgadas; sin embargo, cada vez somos más las que estamos dispuestas a actuar de acuerdo a nuestros propios deseos.
Si estás considerando dar un paseo por el mundo del sexo casual o ya te convertiste en residente, te dejamos algunos puntos a considerar para que tu experiencia sea divertida, segura y placentera.
Conócete
Reflexiona por qué te interesa el sexo sin compromiso y pregúntate qué buscas, a qué le temes y qué esperas. Si tus respuestas no empatan con la liviandad que implican los encuentros casuales, reconsidéralo: no tienes nada que demostrar, ni estás obligada a hacer algo que no te convence.
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Platícalo
Ten la certeza de que como tú, miles de mujeres tienen las mismas inquietudes y no te van a juzgar, al contrario, te van a hacer sentir comprendida. La información quita los miedos, así que lee, cuestiona tus creencias y si no te sirven, crea otras que se adapten al tipo de experiencias que quieres vivir.
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Prepárate
Aunque tuvieras una pareja estable, tú eres la principal responsable de cuidar tu salud, así que quítate la pena y siéntete orgullosa de comprar tu caja de condones. También necesitarás preparación mental para desprenderte de todos esos requisitos que pensabas necesarios para acostarte con alguien. Asume que quizá no haya citas previas, palabras románticas ni mensajes al día siguiente, y está bien. El desapego es parte del sexo casual.
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Confía, pero no demasiado
Necesitas cierto grado de confianza en el otro para compartirle algo tan privado como tu cuerpo, pero ello no quiere decir que tengas que confiar plenamente en él. Toma tus precauciones, si puedes, investiga un poco de la persona con la que te encontrarás y siempre avísale a alguien de confianza con quién saldrás y dónde estarás.
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Sé honesta en tus intenciones
La honestidad es la base de toda relación, incluso de las más casuales. No digas cosas que no sientes ni prometas lo que no piensas cumplir. Tampoco exijas más de lo que estás dispuesta a ofrecer ni des demasiados rodeos cuando ya sabes a qué quieres llegar.
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Un sí nunca es definitivo
Ya lo decidiste, te preparaste, fuiste clara con tu futuro compañero de aventuras y acordaron la cita, pero nada de eso te obliga a seguir adelante si no estás convencida. Aun con el motel pagado, en cualquier momento puedes cambiar de opinión y no tienes por qué sentirte mal al respecto.
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Recuerda, todo cuerpo incluye persona
Que estés buscando sexo casual, no significa que debas tratar al otro como objeto sexual. Preguntarle cómo se siente es un gesto de empatía que se agradece en la cama y en la vida. Además, relaciones hay de todo tipo y ese fuck buddy al que te empeñas en evitar podría convertirse en un gran amigo, un contacto de negocios o el amor de tu vida.
¡Disfrútalo!
No necesitas tener una pareja estable para disfrutar del sexo, de hecho, ni siquiera necesitas una pareja. Así que ¡date gusto! Enorgullécete de tus decisiones, goza cada momento y siéntete plena de saber que eres tú la única que decide con quién comparte los placeres del cuerpo.
