El amor es como un juego de cartas, se reparten a ciegas antes de empezar a jugar, la cuestión es lo que hace cada uno con las cartas que le han tocado. Hay quien juega extraordinariamente con cartas no muy buenas, y hay quien lo hecha todo a perder incluso con cartas estupendas, depende de la suerte de cada uno, del ingenio, la intuición y el coraje.
La materia se transforma en energía y la energía, en materia, los átomos se unen y se vuelven a separar, todo cambia y se transforma; en el amor es igual, pero nada puede pasar de ser a no ser. Elecciones como las que se tienen en el amor o en una relación, sólo consisten en pasar por la vida despiertos o medio dormidos.
En resumen, cuando una persona se cruza por casualidad con alguien que amó, y puede sonreír con alegría, orgullo y afecto, como un artista que mira el cuadro que ha pintado, y aunque ya se está dedicando a otros cuadros, aún está feliz por lo que ha hecho con sus manos, y aún está orgulloso de recordarlo y contento de poder contemplarlo de lejos; es ese el momento, en que uno puede jactarse de decir que vale la pena descubrir el amor.
Si continúas renuente, a continuación te presentamos una serie de razones para que te convenzas:
Es tan feo que casi es hermoso
Cada hora del día, noche y pedazo de vida, adquiere un nuevo significado, se vuelve indescriptible y se convierte en un milagro perfecto. El apetito por vivir se vuelve insaciable, nos da gula, y el después, se queda en el olvido.
Aprendes a confiar
Porque dominar y elegir tus pensamientos como eliges cada aspecto de tu vida, tu ropa, tus alimentos, tus gustos, es fundamental. Ya lo dijo Walt Whitman en alguna ocasión, la fe es el antiséptico del alma.
Convertirte en una mejor persona
Como dice el escritor japonés Murakami al inicio de su libro "Kafka en la orilla", después de atravesar una gran tormenta de arena, la persona que surja de ella no será la misma que penetró en ella. Muchos han derramado allí su sangre y tú, asimismo, derramarás allí la tuya. Tu sangre y, también, la sangre de los demás.
Para tener un compañero de aventuras
El amor es de los campos de batalla más comunes y predecibles, lo que lo hace complicado es el hecho de tener que entrar a veces con los ojos vendados; sin embargo, no es lo mismo entrar solo que en compañía de tu mejor soldado, de esta manera si se cumplen los objetivos lo harás con alegría, si no se cumplen, esperarás alegremente a cumplirlos.
Nos volvemos espejos
Nos convertimos en maestros ciegos de la transparencia para los demás y para nosotros mismos. Hendrix dijo en una ocasión: “El conocimiento habla, la sabiduría escucha”, y en una relación, hay mucho más que escuchar de lo que a veces se puede hablar.
Porque la paz es horrible
Y nadie sabía mejor esto que Charles Bukowski, que así lo expresó en su poema Abrazando la oscuridad. Porque no hay ningún control y no hay ningún plan, porque la paz es la peor cosa, caminando, hablando, sonriendo y pareciendo ser. Con el amor nunca se sabe, sólo es cuestión de dejarse deslizar.
Duele tanto, tanto, tanto que hasta empieza a ser gracioso
Cuando se conoce el lado negro, blanco o gris de las personas; basta con saber que esa persona es humano para comenzar a ver las cosas con un matiz diferente, e incluso también, con un humor diferente.
El orgullo a veces sólo significa quemarse las alas
Toda pelea puede evitarse y la mejor forma de entender esto es comprendiendo que a veces uno mismo ni siquiera quiere pelear, lo que más se quiere es estar con esa persona, y cuando esto se logra dominar, se ha dado un paso gigantesco hacia delante.
Admirar a alguien y alguien que te admire
Tener a alguien que se interese y disfrute lo que haces, con quien poder platicar, coincidir, discutir y argumentar, es algo que se encuentra pocas veces en la vida. Pero si no se busca y no se intenta, ¿cómo experimentarlo?
El tiempo adquiere un significado diferente
Un mes, cinco, o diez años, da igual. El tiempo no se entiende, ni se cuenta, a veces incluso se detiene, carece de utilidad y se aprende a valorar. Mientras está, se aprovecha. Y si se logran romper las barreras del tiempo y combatirlo, que mejor.
Se llora por la fuerza de los sentimientos
Cuando se arrojan los dados, se sabe que es mejor intentarlo con todo e ir hasta el final. De otra forma es mejor ni siquiera intentarlo. A veces duele, sí, pero muchas veces lo vale. Se pueden perder novios, novias, incluso la cordura, pero sentimientos como el amor en el mundo, ninguno. Citando una vez más a Bukowski:
"Hazlo, hazlo, hazlo.
Hazlo.
Después de cierto tiempo, éxitos y fracasos, se entiende que la amistad entre una persona y otra es algo mucho más valioso y extraordinario que el simple hecho de llamarlo amor.
A veces la única manera de entender esto es haciendo frente a la indiferencia, que es en muchas ocasiones, la señal distintiva más evidente de toda la realidad.
Atrévete a descubrir el amor y disfrútalo con los mejores sabores de la nueva Ciel Exprim, crearás nuevas experiencias y disfrutarás tu día a día.
Sabe a limón, tu mente descubre algo más.