Un reciente estudio puso en evidencia las características poco sanas de esta raza.
Los perros Pug se han colocado dentro de las razas favoritas de las personas en los últimos años, ya que su tamaño pequeño, su cuerpo robusto y sus ojos saltones, han conquistado a la gente, pero lejos de lo que se puede apreciar, estos perros sufren bastante debido a su genética, la cual les ocasiona graves problemas de salud durante toda su vida.
Un nuevo estudio de científicos británicos acaba de señalar los padecimientos de esta raza, e incluso consideró que los Pug “ya no pueden ser considerados un perro típico desde una perspectiva de salud”.
La investigación realizada por el Royal Veterinary College de Reino Unido, aseguró que estos caninos que pertenecen a los braquicéfalos, especies de cara plana o achatada y hocico corto, enfrentan condiciones que afectan su calidad de vida.
En el estudio se analizó la salud de cuatro mil 308 perros pug y 21, 835 perros de otras razas: el resultado no fue nada alentador, ya que arrojó que estos lomitos tienen el doble de probabilidades de sufrir más enfermedades al año, en comparación con otros.
“Ahora sabemos que varios problemas de salud graves están relacionados con la forma extrema del cuerpo de los pugs que muchos humanos encuentran tan atractiva”, dijo Dan O’Neill, científico que participó en la investigación.
Entre los padecimientos más comunes de estos animales, se encuentra el síndrome de obstrucción de las vías respiratorias braquicefálicas (BOAS por sus siglas en inglés), esto significa que debido a su hocico muy corto, los pug sufren frecuentemente dificultades para respirar.
Por otra parte, debido a sus problemas respiratorios, son una raza que no tolera los climas calurosos, ya que una tarea tan sencilla como respirar, para ellos es todo un reto.
También aseguraron que la obesidad es común en los Pug, debido a las limitaciones que tienen para hacer actividades físicas.
Por si fuera poco, los pliegues que tienen en su piel, los hacen más propensos a padecer de úlceras y lesiones, esto como consecuencia del constante roce que experimentan.
Cabe destacar que contrario a lo que se piensa, los expertos revelaron que esta raza no es nueva, ya que tiene su origen en el año 551 AC en China, país que los comercializó hacia Europa.